El gigante energético aumenta en un 24,4 por ciento sus ingresos brutos durante el mismo período, hasta los 5,2 millones de euros.
Ligero tropiezo para Neonergia. El gigante energético brasileño filial de Iberdrola obtuvo un beneficio neto de 256,26 millones de reales (unos 67,12 millones de euros) en los nueve primeros meses del año, lo que representa una caída del 4,91 por ciento con respecto al mismo periodo del año anterior, informó la compañía. Aunque los ingresos brutos de la energética en el periodo de enero a septiembre ascendieron a 19.976,55 millones de reales (unos 5.243,03 millones de euros), un 24,4 por ciento más.
El beneficio bruto de explotación (Ebitda) de la compañía a cierre del pasado mes de septiembre se situó en los 2.122,36 millones de reales (unos 556,87 millones de euros), un 6,73 por ciento más. Con la incorporación de Elektro Redes, tras la fusión cerrada el pasado mes de agosto entre las dos participadas por Iberdrola, el grupo Neonergia indicó que ha alcanzado un total de 13,541 millones de consumidores activos, lo que supone un incremento del 25,46 por ciento con respecto al mismo periodo del año anterior.
En el tercer trimestre, Neoenergia sufrió unas pérdidas de 18,43 millones de reales (unos 4,84 millones de euros), lo que supone recortar un 12,06 por ciento los ‘números rojos’ registrados en el mismo periodo de 2016.
Por su parte, los ingresos en el periodo de julio a septiembre alcanzaron los 8.103 millones de reales (unos 2.128,8 millones de euros), un 50,14 por ciento más, mientras que el Ebitda se situó en 616,42 millones de reales (unos 161,92 millones de euros), un 19,41 por ciento más.
Primeros pasos en la Bolsa
A finales del pasado mes de agosto, el consejo de administración de Neoenergia lanzó el proceso para su salida a Bolsa, presentando un folleto preliminar no vinculante ante el supervisor bursátil del país. Sin embargo, decidió aplazar la operación hasta que se dieran unas mejores condiciones del mercado. El proceso podría volver a retomarse a finales de año.
Dentro de la salida a Bolsa, el objetivo de Iberdrola pasa por mantener una posición de control en la mayor eléctrica brasileña, siempre por encima del 50 por ciento del capital, y en ningún caso desinvertir. En el caso del Banco do Brasil, socio de Iberdrola en Neoenergia a través de la propia entidad y de Previ, su fondo de pensiones, la operación le permitiría deshacer su participación, al menos en parte, en el grupo y obtener liquidez.
El acuerdo para la fusión de Neoenergia y Elektro, las dos compañías participadas por Iberdrola de las que surgió el nuevo grupo, ya incluía el compromiso de la multinacional española de sacar a Bolsa el grupo cuando Previ y Banco do Brasil, sus socios en Neoenergia, lo estimaran oportuno.