La Comisión Económica para América Latina y el Caribe estima que el Producto Interior Bruto podrá llegar al 2 por ciento.
La economía mexicana pisa el acelerador. El país azteca aumentará su Productor Interior Bruto (PIB) hasta el 2 por ciento en 2018, casi el doble de lo previsto para el presente año, de un 1,1 por ciento, según las previsiones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal). Una tendencia que, según explica la secretaria ejecutiva de la Comisión, Alicia Bárcena, radica en el repunte en el precio de las materias primas, el aumento del comercio a nivel mundial y al dinamismo de las economías de México y Brasil y Argentina, que se recuperan de una larga y profunda crisis.
Entre los sectores a destacar para para seguir por el buen camino, según Cepal, se encuentran las renovables, que podrían ser un eslabón esencial para captar capital extranjero en Brasil, Perú, Chile y México. También, la minería del litio podría avanzar en Bolivia o Argentina, junto con el turismo en Centroamérica o las manufacturas en las mayores economías de la región. Para ello, entre los desafíos mencionados por Bárcena figura incentivar el modelo de inversión e inserción comercial, así como subirse «al tren que ya arrancó» de la tecnología y el desarrollo sostenible, con el foco en las ciudades inteligentes y la innovación.
A pesar de que en 2015 se registró un retroceso en la economía mexicana, ya este año los datos son más positivos. Cuando la Inversión Extranjera Directa disminuyó un 17 por ciento desde el máximo alcanzado en 2011 con 206.935 millones de dólares. En la región, la Inversión Extranjera Directa sólo creció en nueve países entre 2015 y 2016, entre ellos, Bahamas, Panamá, Colombia, República Dominicana, Brasil y Paraguay, entre otros. «La inversión debería ser mejor que en 2017, la veo más cercana a que se estabilice en 2018», dijo la jefa del organismo que depende de Naciones Unidas.
Es importante recordar que, pese a la recesión, Brasil aumentó un 5,7 por ciento sus ingresos por este concepto en 2016 y fue el principal receptor. Así, es vital saber que los flujos de Inversión representan el 3,6 por ciento del PIB latinoamericano.