Los datos del estudio ‘Estadísticas de Migraciones 2017’ revelan que los ciudadanos del país sudamericanos son los que registran el mayor aumento migratorio interanual.
Descomunal crecimiento de la migración venezolana hacia España. Los datos del estudio ‘Estadísticas de Migraciones 2017’, elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), indican que el número de ciudadanos del país sudamericano en territorio español ha aumentado en 27.960 personas en un solo año. Es decir, han pasado de los 63.268 que existían en 2016 al total de 91.228 que se registraron durante 2017, lo que representa un aumento interanual del 44,2 por ciento.
La evolución registrada por Venezuela es la más alta de todas las nacionalidades. Muy por encima del 15,7 por ciento que ha obtenido Colombia (la nación latinoamericana con más ciudadanos en España), que ha pasado de contar con 138.358 ciudadanos residentes en España durante 2016 a los 160.111 que tenían en 2017. A pesar del elevado crecimiento de las migraciones venezolanas, el país aún está fuera del ‘top 10’ de los ciudadanos extranjeros viviendo en la nación europea. En concreto, se sitúa en el puesto número 13, frente a Colombia que está en el sexto.
Los datos del INE apuntan que el liderazgo migratorio recae en Marruecos (682.515 personas en 2017), seguido de Rumanía (675.086 personas), Reino Unido (285.698), Italia (221.781) y China (183.387). Le siguen Colombia, que se sitúa como el primero de la región sudamericana con 160.111 ciudadanos; Ecuador (140.032 personas), Alemania (139.096), Bulgaria (125.244), y Francia (106.508).
De esta manera, han quedado fuera de los 10 primeros puestos países como Portugal (100.414), Ucrania (99.108), Venezuela (91.228), Argentina (74.466) y Rusia (73.651).
Regreso a los países
El Instituto Nacional de Estadística precisa que un total de 532.482 personas procedentes del extranjero establecieron su residencia en España durante 2017, frente a los 367.878 que abandonaron España con destino al extranjero, lo que supone un 12,4 por ciento más que en 2016.
Asimismo, algunos países han reducido considerablemente su flujo migratorio, como es el caso de Ecuador, con una caída del 3,6 por ciento entre 2016 y 2017. Una tendencia que también se ha percibido en Reino Unido (2,6 por ciento), Bulgaria (1,7 por ciento), Alemania (1,4 por ciento), Rumania (1,3 por ciento), y Portugal (0,5 por ciento).