La Comisión Europea (CE) ha emprendido acciones legales contra el Reino Unido por la aprobación, por parte del Gobierno de Boris Johnson, de ley sobre el mercado interior que entra en conflicto con lo pactado sobre la situación de Irlanda del Norte.
«Este anteproyecto de ley es por su propia naturaleza un incumplimiento de la obligación de buena fe establecida en el acuerdo de retirada. Además, si se adopta como está, estará en total contradicción con el protocolo de Irlanda-Irlanda del Norte», ha dicho la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen, al anunciar que ha enviado a Londres la notificación formal, el paso previo a la aplicación de medidas sancionadoras.
Por ahora y hasta el 1 de enero, el derecho europeo sigue siendo de aplicación en el Reino Unido, por lo que el Gobierno británico tiene dos meses de plazo para responder antes estas acusaciones de la CE, o en su defecto reformar el anteproyecto de ley para que encaje en los acuerdos de retirada.
La medida se ha anunciado precisamente mientras está cerrándose una de las últimas rondas negociadoras antes de que se acaben todos los plazos posibles para llegar a un acuerdo sobre las relaciones futuras con la UE. La CE le reprocha a Johnson que esté tramitando una ley de mercado interior en la que se ignora el compromiso de que el territorio de Irlanda del Norte debe mantener una alineación mínima con las reglas europeas, para evitar que haya que restablecer los controles fronterizos con la República de Irlanda, que permanece en la UE y en el mercado único.
Von der Leyen explicó que el Reino Unido es consciente de que la ley de mercado infringe el derecho internacional e incumple los compromisos adoptados formalmente por su Gobierno.
La Comisión Europea quiere una frontera más fuerte y agilizar las expulsiones de ilegales