De acuerdo a los datos publicados por el índice PMI, las fabricas de la eurozona ha podido frenar el fuerte deterioro sufrido por la pandemia
La actividad del sector manufacturero de la zona euro ha logrado en junio frenar de manera sustancial su deterioro de los últimos meses hasta alcanzar prácticamente el nivel de estabilización, según refleja el índice PMI, que ha superado las expectativas y se ha situado en 47,4 puntos, su máximo en cuatro meses, frente a los 39,4 del mes anterior, aunque las empresas del sector han seguido reduciendo sus niveles de personal.
Entre las economías de la zona euro analizadas, en el mes de junio únicamente Francia e Irlanda, con 52,3 y 51 puntos, respectivamente, superaron el umbral que separa la contracción de la expansión de la actividad, mientras que Grecia (49,4) y España (49) rozaron la estabilización. Por su parte, la actividad manufacturera siguió deteriorándose, pero a menor ritmo, en Italia (47,5), Países Bajos (45,2) y Alemania (45,2)
«Los datos finales del índice PMI de junio se suman a las señales de que las fábricas de la zona euro están experimentando una fuerte recuperación inicial a medida que la economía se reanima tras los confinamientos por la Covid-19», destacó Chris Williamson, economista jefe de IHS Markit, quien subrayó que la producción ha pasado a caer solo un 2% anual desde una tasa de contracción cercana al 30% en abril.
En este sentido, el experto señaló que las expectativas para los próximos doce meses también se han recuperado significativamente a medida que crecen las esperanzas de que la economía continúe reactivándose en los próximos meses, aunque apuntó que, incluso con estos incrementos, la producción y la confianza permanecen por debajo de las máximas prepandémicas.
«Es probable que la persistente debilidad de la demanda, combinada con las medidas de distanciamiento social, actúe como un lastre para la recuperación», advirtió.
En el mes de junio, nuevamente se registró una caída de los nuevos pedidos, aunque al ritmo más débil de cuatro meses. Los nuevos pedidos para exportación volvieron a retroceder y acumulan 21 meses seguidos a la baja.
Por su parte, debido a la reducción de horas de trabajo y a la falta de cargas de trabajo en general, volvieron a registrarse recortes de personal. De este modo, el empleo cayó en junio por decimocuarto mes consecutivo y de nuevo a un ritmo intenso. Todos los países registraron una caída en el empleo manufacturero, encabezada por Alemania, Italia y los Países Bajos.