Europa recupera mascarillas, test y confinamientos por el COVID

La variante ómicron del coronavirus ha vuelto a restringir la actividad social en varios países europeos, mientras que cada vez son más los que blindan sus fronteras frente a los vuelos procedentes de países de África austral para intentar frenar el aumento de los contagios. Siete países europeos han detectado ya al menos algún caso de esta variante, que ha despertado la preocupación de la OMS: Alemania, Reino Unido, Bélgica, Italia, Replica Checa, Países Bajos y Dinamarca.

Países Bajos está ya en confinamiento nocturno para las actividades no esenciales, el Reino Unido reintroducirá el martes mascarillas en tiendas y transporte e Israel se ha convertido en el primer país del mundo en reintroducir la prohibición de entrada al país de los extranjeros.

Mientras tanto, siguen apareciendo casos de la variante ómicron: las autoridades sanitarias de Países Bajos han confirmado este domingo la presencia de al menos 13 casos entre los 61 pasajeros que dieron positivo el pasado viernes tras aterrizar en el aeropuerto de Ámsterdam en dos vuelos procedentes de Sudáfrica.

Las mascarillas volverán a ser obligatorias en comercios y el transporte público en Inglaterra a partir del próximo martes, ha indicado este domingo el ministro de Sanidad, Sajid Javid, lo que supone una importante «marcha atrás» con respecto a la eliminación de las restricciones del pasado mes de julio.

Ese mismo día se pedirá a los viajeros vacunados que se hagan un test PCR, y no de antígenos, a su regreso al Reino Unido. Javid dijo que la situación «no está ni de lejos» tan mal como para pedir trabajar desde casa o reintroducir la obligación de mantener la distancia personal o reducir el contacto social.

 

Restricciones y blindaje fronterizo

Desde la pasada madrugada, los holandeses han vuelto a la distancia interpersonal y el uso obligatorio de mascarillas en la hostelería, los cines y teatros, además de otros espacios cerrados de acceso al público. Los comercios, la hostelería y otros lugares considerados actividades no esenciales como los gimnasios, las piscinas o los museos deberán cerrar máximo a las 17.00 hora local. Se salvan de esta restricción los supermercados, farmacias y gasolineras, que podrán cerrar a las 20.00 horas.

Los suizos han aprobado este domingo en referéndum una ley que permite al Gobierno imponer el pasaporte COVID a los ciudadanos que desean gozar de ciertos servicios o acceder a determinados lugares, como comer en el interior de un restaurante, ir al cine, a misa, a un espectáculo, o asistir a un evento deportivo de más de 1.000 personas. El 61% de los participantes ha votado a favor de la medida, pese a las protestas que se han producido en contra en este país durante las últimas semanas.

De todas las medidas de blindaje fronterizo, la de Israel es la más tajante: vuelve a cerrar sus fronteras a todos los extranjeros durante dos semanas para contener la propagación de la variante ómicron de la covid-19 y se convierte así en el primer país del mundo en hacerlo. El gabinete interministerial de coronavirus decidió en la noche del sábado el cierre de los aeropuertos a vuelos internacionales de todo el mundo, así como reimponer la cuarentena obligatoria a los israelíes que regresen al país, medidas que se impondrán en la madrugada del domingo al lunes.

Pero además, Filipinas ha sido el primer país que impide la entrada desde este domingo no solo a los extranjeros que en las dos últimas semanas hayan estado en siete países africanos (Sudáfrica, Botsuana, Namibia, Zimbabue, Lesoto, Suazilandia y Mozambique), sino que incluye además a países europeos (siete en total: Austria, la República Checa, Hungría, Países Bajos, Suiza, Bélgica e Italia). Indonesia y Nueva Zelanda también han decidido este domingo restringir la entrada de viajeros extranjeros procedentes de países de África austral.

 

Aumenta el número de casos

Los casos de la variante ómicron siguen detectándose en varios países, siete de ellos europeos. El primer caso se detectó el 22 de noviembre en Bélgica: una mujer no vacunada que desarrolló síntomas once días después de viajar a Egipto a través de Turquía.

Las autoridades sanitarias de Países Bajos han confirmado este domingo la presencia de al menos 13 casos de la nueva variante entre los 61 pasajeros que dieron positivo el pasado viernes tras aterrizar en el aeropuerto de Ámsterdam en dos vuelos procedentes de Sudáfrica. El Instituto de Salud Pública (RIVM) está analizando este fin de semana las muestras recogidas a 61 de los 624 pasajeros que llegaron el viernes de Johannesburgo y Ciudad del Cabo, aunque la investigación de las demás pruebas positivas continúa por lo que los casos de la nueva variante pueden aumentar.

Dos pasajeros que aterrizaron el pasado 24 de noviembre en el aeropuerto de Múnich, procedentes de Sudáfrica, fueron confirmados, mediante PCR, como infectados con la variante ómicron del coronavirus.

El Instituto Superior de Sanidad (ISS) de Italia informó de que ha localizado un caso «atribuible» a la cepa ómicron del coronavirus detectada en Sudáfrica y que está sometiendo la prueba a una nueva confirmación.

Las autoridades sanitarias británicas han detectado dos casos de personas portadoras de la variante ómicron del coronavirus, que están ahora haciendo cuarentena. En República Checa, el sábado se confirmó el sábado el primer caso en una mujer vacunada que había regresado de Namibia y se encuentra ingresada con síntomas leves en el Hospital de Liberec, en el norte del país.

Mientras que Dinamarca ha confirmado este domingo los primeros casos de infectados con la variante ómicron del coronavirus , dos viajeros procedentes de Sudáfrica que se encuentran aislados y se está rastreando a sus contactos estrechos.

Sudáfrica advierte del «pánico innecesario»

Israel ha identificado dos casos con la nueva variante: una mujer llegada desde Malawi y otra que aterrizó en el país proveniente de Sudáfrica. El Ministerio de Sanidad ha advertido además que está investigando a 12 pacientes más como posibles portadores de la nueva cepa del coronavirus.

Australia confirmó este domingo sus dos primeros casos tras analizar la secuencia del virus de dos pasajeros provenientes del sur de África que habían dado positivo.

Sudáfrica ha mostrado su malestar por el «pánico innecesario» que se está despertando en torno a la variante ya que señala que los síntomas son «muy débiles». Así lo ha asegurado la presidenta de la Asociación Médica de Sudáfrica y una de las descubridoras de ómicron, la doctora Angelique Coetzee,

«Lo que estamos viendo en Sudáfrica y, recordemos, estoy en el epicentro, es muy débil. Para nosotros son casos leves», ha declarado a la cadena BBC.

Otros expertos del país, sin embargo, incidieron que es muy pronto para extraer conclusiones dado el escaso número de casos identificados.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) se ha mostrado en contra de las drásticas restricciones de viaje aplicadas al sur de África ha pedido que las decisiones se guíen por la ciencia y que se dé apoyo a los países africanos. «Las restricciones de viaje pueden jugar un papel en reducir levemente la expansión de la COVID-19, pero imponen una pesada carga en las vidas y en los medios de vida», ha recordado la oficina de la OMS para África en un comunicado.

Cómo funciona el ‘Pasaporte Covid’ de la UE para viajar durante la pandemia