La industria del turismo está modernizándose tras el duro impacto de la pandemia del COVID-19, lo que revolucionará el futuro de los viajes.
Con grandes cambios en los comportamientos y expectativas de viajes, la comunidad viajera mundial buscará un mayor nivel de seguridad al viajar, opciones más sustentables y cercanas a casa, y la opción de combinar el trabajo en sus viajes, mientras que evolucionan sus preferencias a la hora de elegir a dónde y con quién viajar.
A pesar de las nuevas restricciones de viajes y la incertidumbre que generan, el deseo innato del ser humano por el turismo no se apagó.
Durante las recientes cuarentenas, el 74% de los viajeros expresó que esperaba con ansias la oportunidad de volver a viajar, mientras que el 31% indicó que valora más la oportunidad de viajar y, en el futuro, no la va a dar por sentado.
Estas son las principales predicciones sobre el futuro de los viajes:
Valor vital
El impacto económico del coronavirus inevitablemente generará que en el futuro las personas quieran hacer rendir más su dinero: el 74% de los viajeros va a prestarle más atención a los precios a la hora de planificar un viaje futuro, y el 65% dice que es más probable que busquen promociones y oportunidades de ahorro.
Cerca de casa
En un nuevo mundo signado por el coronavirus, los viajes de cercanía tomaron la delantera. De hecho, el 42% de los turistas planean viajar dentro de su propio país a mediano plazo (dentro de los próximos 7 a 12 meses), y el 28% planea hacer lo mismo a largo plazo (de acá a más de un año).
Buscar escaparse
Durante la cuarentena, muchas personas se lanzaron a la búsqueda de distracción: la gran mayoría de los viajeros (el 98%) le dedicó tiempo a buscar inspiración para sus vacaciones, y el 36% hasta buscó posibles destinos de viaje una vez por semana.
Seguridad y limpieza
Más de cuatro de cada cinco (86%) de los viajeros piensa tomar más precauciones debido al coronavirus.
Para sus viajes a futuro, el 73% solo piensa hacer una reserva en un alojamiento si muestra claramente qué políticas de salud e higiene aplica.
A corto plazo, también se vislumbrará un cambio en las preferencias de transporte y las provisiones de servicio, dado que el 45% pretende evitar el transporte y el 72% aceptará usar tapabocas en lugares públicos.
Conciencia ambiental
La elección de viajes más sustentables en el futuro está cada vez más presente en la mente de los turistas, de hecho, el 79% espera que la industria del turismo ofrezca opciones de viaje más amigables con el medio ambiente.
Además, los viajeros consideran que la industria debe adaptarse a este enfoque a largo plazo: el 75% de quienes contestaron la encuesta indicaron que quieren que sus elecciones de viaje sirvan para apoyar la recuperación del destino que van a visitar, mientras que el 70% espera ver de qué forma su dinero se invierte en la comunidad del destino.
Chau a la oficina
El 48% de los viajeros ya consideró reservar un lugar para hospedarse que les permita trabajar a la distancia y para un 65% no sería problema alargar un viaje de trabajo para poder disfrutar de tiempo libre en el destino.
Las pequeñas cosas
A medida que vamos aprendiendo a vivir con las consecuencias de la pandemia, los viajeros van a empezar a adoptar una forma nueva y más minimalista de experimentar el mundo.
Tres de cada cuatro viajeros (el 73%) piensa tomarse tiempo para disfrutar de pequeños placeres como pasar tiempo al aire libre o con la familia durante sus vacaciones; mientas que más de la mitad (52%) va a buscar experiencias más rurales y menos conocidas.
Además, teniendo en cuenta el renovado énfasis en tener espacios y privacidad, los viajeros buscarán alojamientos que se parezcan a casa: el 49% prefiere hospedarse en casas o departamentos más que en hoteles.
Tecnología y espontaneidad
La innovación tecnológica va a jugar un papel crucial a la hora de reconstruir la confianza de la comunidad viajera y va a ayudar a las personas a viajar de forma segura y responsable.
El 67% de los viajeros está de acuerdo con que la tecnología va a ser importante para mantener los riesgos sanitarios bajo control a la hora de viajar, mientras que el 57% dice que los alojamientos van a tener que recurrir a las últimas tecnologías para lograr que la comunidad viajera se sienta segura.
Menos viajes individuales
La nueva normalidad ha generado transformaciones en los hábitos de las personas y eso se ve también reflejado en la forma de planificar un viaje.
Uno de los cambios que se han observado entre los turistas en la plataforma de la compañía de viajes Despegar, es que han disminuido los viajes individuales, al mismo tiempo que se duplicaron los viajes de tres o más personas, especialmente para los meses de enero y febrero.
La vuelta a veranear en familia ha aumentado de manera considerable, seguramente debido a la necesidad de reconectar con los afectos, luego de un año donde los encuentros familiares no han sido fáciles.
Además, desde la empresa informan que la estadía promedio en turismo nacional desde que se lanzó PreViaje es mayor a la del año pasado.
Flexibilidad a largo plazo
Las políticas de cambio y cancelación más flexibles pueden durar hasta después de la pandemia.
Al menos eso es lo que señalan algunas aerolíneas estadounidenses, según información difundida por la cadena estadounidense CNBC.
Aerolíneas como American, Delta y United, que usualmente cobran alrededor de 200 dólares por cambios de fecha en vuelos nacionales, para los viajeros que han comprado las tarifas más básicas, dijeron que revisarán sus políticas de cobro.
La intención es extender el derecho a cambios de fecha en vuelos nacionales a más clases de tarifas, que hoy no incluyen esta facilidad, y permitir a los viajeros adelantar su vuelo en el aeropuerto (sujeto a disponibilidad de asientos) para cualquier momento del mismo día, sin costo extra.
Experiencias exclusivas
“Evitar el hacinamiento debería ser la ley hasta que la población esté vacunada. Con esto, al menos en el plan ideal, quedan descartados los paseos abarrotados, las playas llenas de gente y los viajes en autobús; mientras que los planes que incluyen playas aisladas, hoteles con pensión completa y experiencias exclusivas de descanso y relajación serán las más apetecidas. El bote lleno de gente escuchando música fuerte se cambiará por una lancha privada y romántica. Un tour privado le da al viajero más autonomía y seguridad”, concluyeron los especialistas.