Chile y Brasil impulsarán la economía regional con su acuerdo comercial

Michel Temer, presidente de Brasil, y Sebastián Piñera, presidente de Chile.
Michel Temer, presidente de Brasil, y Sebastián Piñera, presidente de Chile.

El tratado bilateral está diseñado para impulsar las inversiones, el intercambio de bienes y aumentar las sinergias con Mercosur.

Chile y Brasil destacan que el Acuerdo de Libre Comercio reforzará la integración regional.
Chile y Brasil destacan que el Acuerdo de Libre Comercio reforzará la integración regional.

Chile y Brasil han suscrito un Acuerdo de Libre Comercio (ALC) para dar un mayor impulso a las inversiones y el intercambio de bienes, un pacto que también buscará servir como aproximación entre el bloque Alianza del Pacífico y el Mercado Común del Sur (Mercosur).

El presidente de Brasil, Michel Temer, viajó a Santiago para sellar con su homólogo chileno, Sebastián Piñera, el pacto que incluye 17 temas no arancelarios, como comercio de servicios, electrónico y medidas sanitarias y fitosanitarias, entre otros.

Ambos gobiernos destacaron que el ALC apuntaría además a reforzar la integración regional, más aún cuando Chile es uno de los miembros de Alianza del Pacífico (integrado además por México, Colombia y Perú) y Brasil encabeza junto con Argentina el bloque del Mercosur.

Entre enero y septiembre de este año, el intercambio comercial de ambas naciones fue de 7.200 millones de dólares, un alza interanual del 13 por ciento.

Brasil es el mayor socio comercial de Chile en América Latina y es el principal receptor de la inversión directa del país austral en el exterior, con un stock acumulado de 35.253 millones de dólares (1990-2017), lo que equivale a un 29,5 por ciento del total de las inversiones chilenas directas en el mundo.

El ALC será un complemento al Acuerdo de Complementación Económica 35, que regula el comercio entre Chile y los países del Mercosur (incluido Brasil) en materias arancelarias y que actualmente tiene arancel cero para toda la lista de productos.

Esta es la primera vez que Brasil asume, en un acuerdo bilateral, compromisos en materia de comercio electrónico, buenas prácticas regulatorias, transparencia y anticorrupción, Cadenas Globales y Regionales de Valor, Género, Medio Ambiente y Asuntos Laborales.