El Consejo de Ministros alemán ha aprobado el proyecto de los presupuestos para 2024 en los que apuesta con un retorno a la senda de la austeridad mediante la consolidación presupuestaria en un momento en el que el país se encuentra en recesión técnica.
«No hay margen para gastos que no estén compensados con otras medidas que signifiquen un ahorro a largo plazo», ha dicho el ministro de Finanzas, Christian Lindner, al presentar el proyecto de presupuestos ante la prensa.
Según Lindner, los presupuestos ponen fin al «modo crisis de la expansión presupuestaria» que habían marcado los años de la pandemia y la crisis energética, que hicieron necesarias la financiación de diversas formas de ayudas.
El gasto deberá bajar de 476.300 millones en este año a 445.700 millones en 2024 y el déficit se calcula en 16.600 millones de euros, con lo que se volverá a aplicar el dispositivo conocido como freno a la deuda, anclado en la Constitución alemana
Menos dinero para Defensa
Todos los ministerios, con la excepción del de Defensa, sufren recortes. El freno a la deuda estipula que, en tiempos de normalidad económica, el déficit no puede superar el 0,35 por ciento del PIB.
El proyecto de Presupuestos se conoce mientras que Alemania está técnicamente en recesión por encadenar dos trimestres de caída del Producto Interior Bruto. El Bundesbank no obstante prevé que el PIB deje el terreno negativo en los datos del segundo trimestre de 2023, que se conocerán el próximo 31 de julio.
Lindner ha calificado el cumplimiento del freno a la deuda de algo que «no es sólo un precepto constitucional sino también un mandato de la sensatez económica, expresión de la responsabilidad con futuras generaciones y una señal más allá de las fronteras alemanas».
Aprobado el plan financiero a medio plazo hasta 2027
El Consejo de Ministros ha aprobado también el plan financiero a mediano plazo hasta 2027. En el plan a medio plazo hay todavía una serie detalles por aclarar y en los que hay diferencias entre los partidos de la coalición de Gobierno que preside el socialdemócrata Olaf Scholz.
Así, por ejemplo, mientras que los fondos para asegurar el mínimo de existencia para los niños -que deberá entrar en vigor en 2025, son calculados en 2.000 millones de euros por Lindner, también presidente del Partido Liberal (FDP), la titular de Familia, la verde Lisa Paus, había contemplado inicialmente 12.000 millones de euros.
«Es claro que los 2.000 millones no alcanzarán si queremos contener la pobreza infantil», ha dicho el copresidente de Los Verdes, Omid Nouripour.
Entre los recortes en Familia para 2024 se destaca la eliminación del subsidio por licencia de maternidad o paternidad para familias que tengan ingresos superiores a los 150.000 euros al año. Hasta ahora el límite eran 300.000 euros al año.
También faltan por aclararse detalles sobre el Fondo para el Clima y la Transformación (KTF) con el que se deberán pagar las subvenciones para instalar calefacciones que generen menos emisiones de CO2.
Los presupuestos deberán ser votados por la cámara baja del parlamento (Bundestag) el 1 de diciembre y hasta entonces es de esperar que haya cambios en el proyecto original.