La célebre Kim Kardashian ha sido responsable de un fraude financiero al promocionar una criptomoneda -por las que muchos han acabado arruinados- a través de sus redes sociales sin desvelar que había recibido 25.000 dólares por ello.

“¿Chicos, están con las criptos? Este no es un consejo financiero, pero quiero compartir lo que mis amigos me acaban de contar sobre la moneda de EthereumMax”. La influencer compartió este mensaje a través de sus redes sociales donde cuenta con más de 331 millones de seguidores, tras fijar un pacto con el criptoactivo, en el cual se determinaba que ella cobraría 250.000 dólares a cambio de la promoción de la criptomoneda sin comunicárselo a sus seguidores, según informa Reuters.

Este tipo de promociones se llevan a cabo con el fin de elevar de forma rápida y masiva el número de clientes que apuestan por ese ‘token’, aumentando así el precio de este para que muchos inversores ganen dinero. A su vez, hay otros inversores que pierden grandes cantidades de dinero de esta manera y, así, demandaron años atrás a otras celebridades como el boxeador Floyd Mayweather Jr. o la exestrella de la NBA Paul Pierce por el mismo fraude.

La ley americana obliga a decir si cobras por promocionar un valor bursátil

Según indica la ley estadounidense, las personas que promocionan un valor bursátil o criptoactivo tienen que revelar que están recibiendo un pago por ello. El presidente de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), Gary Gensler, amplía: “se trata de proteger al público inversor cuando alguien promociona una acción, ya sea una celebridad o una persona influyente”.

La Kardashian ha llegado a un acuerdo con la SEC para librarse de los cargos por la promoción ilegal y para ello debe pagar una multa millonaria de 1,26 millones de dólares. “Quiero reconocer la cooperación de la señorita Kardashian. Lo apreciamos mucho”, expuso Gensler.

A pesar del reconciliador mensaje del presidente, Kim no admite ni niega las conclusiones sacadas por la Comisión, aunque según su abogado Michael Rhodes “está satisfecha de haber resuelto el caso”. Por otro lado, los dueños del criptoactivo no pueden mostrar la misma satisfacción con las rectificaciones de Kim ya que la criptomoneda EMAX descendió su valor hasta un 97 por ciento arruinando a los clientes que habían puesto dinero en ella.

Escasos meses antes del suceso Kim Kardashian lanzó una firma de capital privado que se interesaba en la inversión en medios de consumo y medios de comunicación y este acontecimiento ha llevado a su abogado a aclarar que la estrella “quería dejar atrás este asunto para evitar una disputa prolongada”, y añade que “el acuerdo al que ha llegado con el SEC le permite poder seguir adelante con sus diferentes actividades empresariales”.