Protección Temporal: 58 organizaciones venezolanas presionan a Sánchez

Pedro Sánchez, presidente de España.
Pedro Sánchez, presidente de España.

La iniciativa de la ONG ‘Un Salvavida para Venezuela’ sigue ganando aliados en las últimas semanas.

58 organizaciones venezolanas presionan al Gobierno de España para que apruebe la Protección Temporal.
58 organizaciones venezolanas presionan al Gobierno de España para que apruebe la Protección Temporal.

Aumenta la presión para que España apruebe la Protección Temporal a los venezolanos. La ONG ‘Un Salvavidas para Venezuela’, junto a 52 organizaciones y partidos políticos, envío una carta al presidente español Pedro Sánchez para solicitar la ayuda migratoria a la diáspora venezolana. Un iniciativa que, de aprobarse por el Gobierno, permitirá a los venezolanos tener pleno acceso al mercado laboral, así como a los servicios sanitarios y el libre tránsito por el país.

La carta, que aún no ha tenido respuesta por parte del Gobierno de Sánchez, ha sumado aliados en las últimas horas. Por ejemplo, la Asociación de Pensionados y Jubilados de Venezuela (dirigida por Pedro Ontiveros) Asociación Libertad y Democracia (dirigida por Isadora Zubillaga) han sido las dos primeras en incorporarse a las 53 organizaciones y partidos políticos iniciales.

Éste lunes 17 de septiembre el listado ha crecido un poco más. Según ha informado la ONG ‘Un Salvavidas para Venezuela’, también han mostrado su apoyo a la iniciativa tres nuevas organizaciones: Venezuela Unidad (de Madrid), Venezolanos en España, y el Despacho Jurídico Rosario Casanova (Bilbao), bajo la representación de Alberto CasillasAlberto Pérez Emma Rosario Casanova, respectivamente.

La carta del Salvavidas

La carta que recibió Sánchez afirma que «son miles los venezolanos que han arribado a este país en los años recientes, quienes se encuentran en una situación de absoluta precariedad económica, dado a que no tienen papeles que acrediten su residencia en España, lo cual les impide trabajar a fin de proveer los recursos necesarios para el sustento de sus familias, convirtiéndose en algunos casos, en una carga para el estado español y para fundaciones y asociaciones que proveen ayudas a los más necesitados».

Asimismo, puntualizan que «en su gran mayoría gente joven, y/o con una buena preparación, que se está viendo obligada a trabajar en la economía sumergida, sin poder prestar los servicios técnicos o profesionales para los que están preparados». En este sentido, no dudan en que podrán «contribuir al bienestar y desarrollo de este país, así como a participar en su tejido social, mediante el pago de la seguridad social y los impuestos correspondientes».