La Fiscalía investiga mensajes en RRSS que incitan a agredir a los migrantes

La investigación por delitos de odio se inició por mensajes en un foro de WhatsApp con mensajes violentos contra los migrantes
La investigación por delitos de odio se inició por mensajes en un foro de WhatsApp con mensajes violentos contra los migrantes

La fiscal jefe de Las Palmas, Beatriz Sánchez, ha ordenado este lunes la apertura de una investigación por posibles delitos de odio contra varios de los participantes en foros de WhatsApp en los que se intentó organizar grupos para amedrentar o golpear a los migrantes en la isla de Gran Canaria.

El Ministerio Público investiga, en concreto, varios mensajes y foros que circularon hace dos semanas con llamamientos expresos a desplazarse al sur de Gran Canaria en grupo para atacar a los migrantes que están alojados en algunos establecimientos turísticos reconvertidos temporalmente en refugios humanitarios, según ha confirmado la fiscal jefe de la provincia.

La Fiscalía ya había anunciado que iba a permanecer vigilante ante cualquier conducta que incitara al odio xenófobo o racista contra quienes han llegado en patera, y que estaba en contacto con la Policía y la Guardia Civil para conocer las medidas preventivas que estaban tomando al respecto para evitar incidentes.

Contenido amenazante contra los inmigrantes

En varios grupos de mensajería para móviles circularon hace dos semanas numerosos mensajes escritos y de audio de contenido amenazante contra los inmigrantes, con frases como «los moros van a morir» o llamamientos a organizarse en grupos armados para perseguir en el sur de Gran Canaria a los de origen magrebí.

Los mensajes circularon en medio de la tensión que había generado la difusión por WhatsApp y por redes sociales de varios vídeos de una pelea y de algunos incidentes protagonizados por inmigrantes (o atribuidos a ellos) en el sur de Gran Canaria, a veces magnificados hasta el punto de que la Policía tuvo que desmentir en Twitter el bulo de un homicidio construido a partir de uno de esos altercados.

En los últimos días, se han celebrado hasta tres manifestaciones contra la presencia de los migrantes en tres barrios de Las Palmas de Gran Canaria (Las Rehoyas, El Lasso y La Isleta (los dos últimos albergan campamentos humanitarios), infringiendo en algunos casos el toque de queda (22:00 horas).

Denuncia de amenazas y agresiones

Por su parte, la Fundación Cruz Blanca, dependiente de los Hermanos Franciscanos, ha denunciado que el campamento que gestiona para el Ministerio de Migraciones en el barrio de El Lasso es apedreado de forma repetida y sus usuarios sufren amenazas y agresiones.

«Basta de tirar piedras al interior del centro. Ya basta de recibir a nuestros nuevos vecinos al grito de ‘terroristas’. Ya basta de amenazas. Ya basta de agresiones. En definitiva, que ya basta de culpabilizar a los otros de nuestra disconformidad con las decisiones políticas que se están tomando», aseguraba esta ONG en un comunicado colgado en su web el pasado miércoles.

También ha sido víctima estos días en Las Palmas de Gran Canaria de una agresión xenófoba la hija de la activista saharaui Aminatou Haidar, a la que un grupo de jóvenes que se bajó de un coche golpeó cuando caminaba por la calle vestida con las ropas tradicionales de su pueblo, según ha confirmado la afectada a la Ser y recoge Efe.

La Fiscalía no tiene conocimiento formal aún de los ataques al campamento de El Lasso y de la agresión a la hija de Haidar, pero su portavoz ha precisado a Efe que los investigará si la Policía le traslada información sobre ambos sucesos con detalles que considere que pueden ser constitutivos de delito.

Ante la crisis migratoria que se estaba produciendo en las islas Canarias, con un aumento de la llegada de migrantes del 1.019% entre enero y noviembre de 2020, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones habilitó con carácter de urgencia campamentos con 7.000 plazas en las islas de Gran Canaria, Tenerife y Fuerteventura y desmanteló el campamento de primera acogida que se había instalado en el muelle de Arguineguín, en el sur de Gran Canaria.

El miedo ante el fenómeno migratorio