Omar Malpartida supera la barrera de los 300.000 euros en su cuarto proyecto gastronómico

Omar Malpartida, fundador de Tiradito & Pisco Bar. Foto: G.R.

El chef peruano Omar Malpartida llegó a Madrid en 2013 y va camino de abrir su cuarto restaurante en la capital española. Un proyecto con el que siempre soñó, muy trabajado y dirigido a un cliente que quiere dar un viaje por el Perú a partir de la gastronomía.

“El cliente encontrará productos que no existen en España, que únicamente traemos nosotros, y que trabajaremos combinando técnicas ancestrales y modernas”, cuenta Malpartida. Con el nuevo restaurante prevé crear entre 12 y 15 nuevos empleos. Un apoyo al mercado laboral que llegará a finales de año y será posible gracias a una inversión que superará considerablemente las dotaciones de 300.000 euros destinadas a dos de sus anteriores proyectos.

El nuevo concepto gastronómico, desarrollado durante los últimos 18 meses, cuenta con el ‘background’ económico y profesional de Malpartida, quien ha alcanzado el éxito empresarial hasta en tres ocasiones. En concreto, con sus restaurantes: Tiradito & Pisco Bar, Chambi-Buns y Sánguches del Mundo y Barra M.

“Siento que hice todo lo que tenía que hacer para montar este proyecto. Esos tres primeros restaurantes me han abierto el camino para afrontar este nuevo reto que me va a permitir competir en otra liga, con una mayor inversión y un público más exigente”, explica. Un proyecto, en definitiva, mucho más gastronómico.

Sus tres anteriores conceptos

Tiradito & Pisco Bar fue el inicio de todo. A su llegada a Madrid, Jaime Pesaque, uno de los chefs que han influenciado su carrera, le propuso dar salida al proyecto como jefe de cocina. El joven cambió totalmente el concepto del restaurante, le dio “alma y corazón”. A los cuatro meses compró acciones del negocio para convertirse también en propietario del mismo. Malpartida siempre considerará a Tiradito, en el que invirtieron inicialmente entre 250.000 y 300.000 euros, como su “hijo adoptivo”.

Omar Malpartida tras la barra de Tiradito & Pisco Bar durante un momento de la entrevista. Foto: G.R.

Tras varios años dedicados a Tiradito, el chef peruano decide poner en marcha Chambi, el primero de los conceptos que considera totalmente suyo. Con una inversión mínima, de 20.000 a 30.000 euros, este proyecto se creó hace nueve meses con el fin de dar a conocer en Madrid la comida rápida peruana, los sánguches, fusionándola con la comida china.

Aún con los primeros pasos de su proyecto personal, se aventura en un nuevo negocio: Barra M, en el que invirtió entre 250.000 y 300.000 euros, pensado para ser un concepto exportable y funcional en todas partes del mundo, que combina comida callejera del mundo latinoamericano, asiático y europeo.

El futuro de Tiradito, Chambi y Barra M

Los planes del joven chef para estos tres conceptos no pasan en ningún caso por la franquicia. “Las franquicias con el tiempo se llegan a distorsionar. No me gustaría que mis recetas pierdan la esencia”, apunta Malpartida, quien habla de vender su marca.

Las franquicias con el tiempo se distorsionan

Tiradito será vendido como marca en lugares vírgenes, donde no se conozca la comida peruana, porque “es el mejor lugar en el que probar por primera vez comida del Perú”. Para Chambi aún no tiene planes claros. Lo que sí le gustaría es que el concepto de Barra M llegara, también como marca, a Lima. “Creo que es el futuro de la gastronomía peruana actual”, señala.

Turismo gastronómico

Todos sus conceptos han sido creados en Madrid. El lugar donde ha encontrado un mercado complicado y exigente, pero perfecto para poder generar la “revolución de la cocina peruana”. Un movimiento gastronómico que desarrollará en su cuarto restaurante; ése en el que invitará a viajar por su país a través de la gastronomía, y que pretende que tenga repercusión mundial.

“Estamos hablando de exportación de productos y mano de obra, de crecimiento económico para el Perú y también para España a partir de una sola actividad, el turismo gastronómico. Madrid es perfecto para eso, le conviene a mi país y me conviene a mí”, explica. Un proyecto muy ambicioso que “da sentido” a su vida y que pone de manifiesto el coraje que, según él, aprendió de Pesaque.


Omar Malpartida estudió Gastronomía y Arte Culinario en Le Cordon Bleu Perú. El chef argentino Mariano Takinami y el peruano Jaime Pesaque han influenciado su carrera, según sus propias palabras. Así mismo, el joven, de 28 años, ha madurado y adquirido conocimientos realizando stages con los mejores chefs del mundo, entre los que se encuentran Quique Dacosta o los hermanos Roca. Su esfuerzo, creatividad y emprendimiento le hicieron ganador en 2016 del premio “Orgullo Peruano” en la categoría “Compatriota Emprendedor”.