El fabricante de autos italianos Ferrari se encuentra en una pelea muy desagradable con alguien que, en el mundo de negocios, supuestamente es sagrado: un cliente. Se trata del diseñador alemán Philipp Plein, un amante de los Ferrari. La disputa se centra en las fotos que Plein ha subido de su propio Ferrari a Instagram, imágenes que el fabricante ha clasificado como muy desagradables.
Esta semana, los abogados de Ferrari le mandaron una carta a Plein en la cual le piden que elimine una foto que ha subido a Instagram que muestra sus zapatos verdes encima de un Ferrari. El automóvil, un Ferrari 812 Superfast verde de 12 cilindros que cuesta alrededor de 339.000 euros, es del mismo Plein, como hemos dicho antes, que al parecer le encanta tener zapatos del mismo color que su auto.
En la carta, la empresa alega que Plein está asociando el logo y los autos de Ferrari con un estilo de vida “totalmente inconsistente con la percepción de marca de Ferrari”. Añade que “el comportamiento” de Plein es dañino y serio. Además, Ferrari afirma los contenidos de su Instagram, entre los cuales está un vídeo de una mujer en biquini posando al lado de un Ferrari y usando una botella de alcohol como una manguera, “en sí mismas son desagradables”.
Al final, Ferrari le da a Plein 48 horas para eliminar las fotos de Instagram, la web y cualquier otra red social. Comenta que se quejará “del comportamiento ilegal, injusto y dañino” a los tribunales.
Como se pueden imaginar, Plein, el fan que ama a Ferrari, no se ha tomado bien la carta de los abogados de la empresa. El diseñador declaró que estaba decepcionado y repugnado por el comportamiento de Ferrari. Cuenta que compró su primer Ferrari hace 10 años y que recientemente le compró uno a su madre como regalo de cumpleaños.