La posición total de la inversión extranjera (stock) en España se situó en 387.315 millones de euros al cierre de 2015, con un aumento del 0,5 por ciento sobre 2014.
Si se descuentan las Entidades de Tenencia de Valores Extranjeros, que no tienen efectos económicos directos, la inversión productiva alcanzó los 347.745 millones de euros, un 1,9 por ciento más que en el ejercicio anterior, según los datos de las 12.346 empresas que figuran en el Registro de Inversiones Extranjeras (RIE).
De estas inversiones productivas dependen 1,18 millones de empleos, un 1,5 por ciento más que en 2014. La cifra de negocios generada por el stock extranjero ascendió a 389.450 millones de euros, en torno a un tercio del PIB español, con un incremento del dos por ciento sobre el año anterior.
Los resultados de las empresas en las que tienen participación inversores extranjeros (sólo se consideran a estos efectos porcentajes superiores al 10 por ciento) aumentaron un 6,6 por ciento, hasta 21.310 millones de euros.
El stock de inversión extranjera es el resultado de sumar el valor de las participaciones en el patrimonio neto (valor contable) de la empresa en que se realiza la inversión directa y el saldo vivo de los préstamos netos de inversores no residentes a esas empresas.
Los datos del RIE reflejan que el aumento del stock productivo se debió, fundamentalmente, al incremento del patrimonio neto en un 6,3 por ciento, dado que la financiación de inversores extranjeros a sus participadas se redujo un 13,5 por ciento, reflejo de la mejora en el acceso a la financiación en España. El stock se concentró, sobre todo, en sociedades no cotizadas, que representaron un 91 por ciento del total del patrimonio neto.
La posición de inversión productiva está altamente concentrada en grandes empresas: 100 grupos empresariales absorben el 61,7 por ciento del total en tanto que 2.283 empresas apenas aportan el 1,5 por ciento de la inversión productiva.
Respecto a la procedencia de la inversión, Estados Unidos encabeza el listado, con un 14,4 por ciento; seguido de Reino Unido (12,8 por ciento), Italia (11,8 por ciento) y Francia (11,5 por ciento). Los diez primeros países representan el 80,7 por ciento del stock. Los cuatro países principales repiten posiciones respecto al ejercicio 2014, si bien el stock procedente de Reino Unido subió un 10 por ciento y el de Francia, un 3,2 por ciento, mientras que el de EE.UU bajó un dos por ciento y el de Italia, un 6,3 por ciento.
El stock por sectores receptores de inversión continúa estable en los últimos años y se concentra en el suministro de energía eléctrica y gas (15,8 por ciento); fabricación de otros productos minerales no metálicos (8,7 por ciento); telecomunicaciones (6,7 por ciento); comercio al por mayor e intermediación comercial (6,5 por ciento); y actividades inmobiliarias (4,9 por ciento), entre otros.