El Ministerio de Sanidad decidió solo sumar 374 plazas más al MIR, pese a estar en plena pandemia del COVID-19.
A pesar que Pedro Sánchez presumió de una oferta de plazas de Formación Sanitaria Especializada superior a las 10.000 vacantes, el impacto entre los médicos es casi anecdótico.
La Convocatoria 2020/21 ofertará 10.249 vacantes, un 5,9 por ciento más que la convocatoria previa, tras la decisión tomada por la Comisión de Recursos Humanos del Sistema Nacional de Salud.
En el caso del MIR, se pasa de ofertar 7.615 a 7.989 plazas, lo que supone un incremento de tan solo 374 vacantes (el 5 por ciento).
Una situación similar a la que ocurre en el PIR, que pasa de 189 a 198 vacantes (5 por ciento más); y en Enfermería, que pasa de 1.495 a 1.683 vacantes (un 13 por ciento más).
Irónicamente, en el marco de la pandemia del COVID-19 se hicieron ‘recortes’ en las plazas de Farmacia y de Biología.
Por otra parte, se mantendrán aspectos de las convocatorias previas como la reserva del 7% de plazas para personas con discapacidad superior al 33%. Así, en esta convocatoria sumarán 717 plazas.
También se mantendrá el cupo actual de extranjeros no comunitarios sin permiso de residencia, trabajo o estudios (un 4% para Medicina, 3% para Farmacia y 2 % Enfermería).
Examen MIR y plazas para extracomunitarios
La prueba de acceso para las diferentes titulaciones tendrá lugar el 27 de marzo de 2021.
Sanidad afirma que la fecha seleccionada tiene como objetivo iniciar la recuperación del cronograma habitual, facilitando la incorporación, cuanto antes, de los nuevos residentes.
Así, la fecha probable para el inicio de los actos de adjudicación será a partir del 16 de junio y la incorporación a la plaza adjudicada a partir del 15-16 de julio.
El examen constará de 175 preguntas más 10 de reserva, con cuatro opciones de respuesta, de las que sólo una es correcta. La duración de la prueba será de 4 horas.
Todos los aspirantes, incluidos los del turno de personas con discapacidad, deberán ser aptos en el examen médico inicial a su incorporación a la plaza adjudicada.
Y se mantiene la obligatoriedad de acreditar el nivel C1 o C2 de conocimiento del español en la presentación de solicitudes, en el caso de aspirantes procedentes de países cuya lengua materna no es el español.