El consumo de Coca-Cola se desplomó durante los primeros seis meses de 2020, doblando la caída en el resto de Europa producto de la pandemia
Coca-Cola European Partners –la embotelladora europea del popular refresco— publicó este jueves sus resultados semestrales con una caída del beneficio del 75% hasta los 126 millones de euros. El recorte de los números de la cotizada fue generalizado en todo el continente, pero fue especialmente abrupto en España, donde los ingresos descendieron el 48% en el segundo trimestre.
La región de Iberia; compuesta por España, Portugal y Andorra; pasó de ser la más importante a cerrar el podio de ingresos de la cotizada. “Los volúmenes cayeron por la debilidad del turismo y la exposición al canal de bares y restaurantes, particularmente en España”, admite la firma presidida por Sol Daurella. Ni se salvaron las ventas en supermercados, que también “sufrieron”, añade.
De este modo, Coca-Cola nota las consecuencias del severo confinamiento español, que cerró bares y restaurantes durante meses. Un claro ejemplo es que los refrescos embotellados en cristal –los más vendidos en el canal Horeca— perdieron el 85% de sus ventas entre abril y junio.
Así, las ventas de la marca se quedaron en 388 millones (-48%) en el segundo trimestre; una cifra asciende a los 917 (-28,5%) si se tiene en cuenta toda la primera mitad de 2020.
España dobla la caída europea
Más allá de liderar otros índices macroeconómicos de mayo relevancia como la caída del PIB, España también es líder destacado en el descenso de la compra de Coca-Cola. Si los ingresos rondan el 50% en el país en el segundo trimestre, ninguno de los otros mercados de Coca-Cola European Partners supera el 25% de rebaja, pues su confinamiento no fue tan duro.
Detrás de Iberia -la empresa no desagrega los datos pero sí detalla que España es el país que sale peor parado- figura Francia, con un recorte del 25% de las ventas hasta los 395 millones de euros. De cerca le sigue Alemania, con una contracción del 22,5% hasta los 497 millones de euros.
En la región Norte de Europa –formada por Benelux, Noruega, Suecia e Islandia– la bajada de las ventas fue del 20% hasta los 548 millones de euros. Mientras, Reino Unido fue el estado con menor impacto, con una baja del 14,5% de los ingresos hasta los 531 millones.