General Cable afirma que cerrar sus fábricas ubicadas en Barcelona forma parte de una estrategia de reorganización de la operación en el sur de Europa

El grupo General Cable, dedicada a la fabricación de cables de telecomunicación para la industria, ha anunciado su intención de cerrar sus fábricas en Manlleu y en Montcada i Reixac, en Barcelona, y de despedir a sus 600 empleados, ha informado CCOO en un comunicado.

Fuentes de la empresa han rebajado la cifra de trabajadores afectados a 487 (334 en la planta de Manlleu y los 153 restantes en la de Montcada i Reixac).

La dirección del grupo ha informado de estos planes al comité de empresa y los sindicatos en una reunión este viernes y ha justificado los cierres por necesidades de reorganización en el sur de Europa, ha añadido el sindicato.

El secretario general de CCOO de industria de Cataluña, José Antonio Hernández, ha explicado a Efe que la compañía tiene previsto comunicar oficialmente la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) la semana que viene.

General Cable se fusionó en 2018 con Prysmian, multinacional italiana líder mundial en fabricación de cable Prysmian decidió hace unos meses un ajuste de personal que implicó el cierre de una oficina en Barcelona.

Además de las plantas de Manlleu y Montcada, el grupo cuenta con fábricas en Vilanova i la Geltrú, Santa Perpètua y Abrera, todas en Barcelona, y otra en Maliaño, localidad del municipio de Camargo (Cantabria), que no están afectadas por el ERE.

Los sindicatos han reclamado este viernes a la dirección de la compañía que plantee alternativas a los despidos y al cierre de los dos fábricas, tras recordar que estas medidas no están respaldadas por un argumento.

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