El Fondo es optimista con la evolución de la economía del país latinoamericano, debido a las nuevas bases implementadas por el actual gobierno.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) recomendó al futuro Gobierno salvadoreño afianzar las políticas fiscales y la gobernabilidad para reducir la deuda pública, frenar la corrupción y elevar el crecimiento a largo plazo.
El equipo técnico del FMI reconoció, a través de un comunicado, que el actual Gobierno sentó las bases para un crecimiento sostenido, mediante reformas estructurales y la facilitación de una transición política sin contratiempos.
«Sobre la base de estos logros, la administración entrante debería profundizar la consolidación fiscal con el fin de reducir la deuda pública«, señala el comunicado, en alusión al mandato de cinco años que iniciará el presidente electo, Nayib Bukele, el próximo 1 de junio.
Además, la delegación del FMI aconseja «intensificar las reformas para mejorar la eficiencia de la administración pública y elevar el crecimiento a largo plazo y fortalecer el marco de gobernabilidad con el fin de contener el delito y la corrupción».
«El sólido desempeño económico es una oportunidad para fortalecer aún más la posición fiscal», afirmó el equipo de expertos, que llegó al país el pasado 11 de marzo.
Según el FMI, la economía salvadoreña muestra un buen desarrollo, apoyado por el fuerte consumo interno y la inversión, con un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del 2,5% en 2018.
“El gasto social sostenido y el crecimiento económico han resultado en una mejora sustancial en los indicadores de desarrollo social y humano, incluyendo pobreza y desigualdad, a lo largo de la última década», destaca el dictamen.
A corto plazo, el organismo financiero espera un aumento del PIB por encima del potencial, y que el sostenido flujo de remesas compense el déficit de la balanza comercial.
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