Michelle Bachelet, la nueva Alta Comisionada de la ONU para los DDHH, ha criticado al país europeo, que responde estar “orgulloso” de su nueva política migratoria.
El Gobierno italiano ha salido en defensa de la política migratoria de la coalición que conforman el Movimiento 5 Estrellas y la Liga, refutando las declaraciones «injustas» e «infundadas» realizadas la víspera por la nueva Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.
En su primer discurso ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, Bachelet lamentó «el posicionamiento político» del Gobierno italiano tras el cierre de sus puertos a los barcos de rescate de las ONG en el Mediterráneo y previno que ello, junto con «otros acontecimientos, tiene consecuencias devastadoras para muchas personas ya vulnerables». «
Aunque el número de migrantes que cruzan el Mediterráneo ha caído, la tasa de muertes entre los que realizan esta peligrosa travesía ha aumentado en los seis primeros meses del año», resaltó.
El Ministerio de Exteriores ha contestado a la antigua presidenta chilena con un largo comunicado en el que defiende que el país ha rescatado en los últimos años a miles de migrantes en el mar a cuenta principalmente de las arcas públicas, además de llevar a cabo iniciativas para apoyar a los países de origen de los migrantes.
Igualmente, según la Farnesina, se ha solicitado «compartir el esfuerzo» dentro de la Unión Europea y se ha buscado el respaldo de las agencias especializadas de la ONU como ACNUR y OIM.
Por ello, ha considerado «inadecuadas, infundadas e injustas» las palabras de Bachelet y confiado en que lo expuesto en su comunicado le haga «entender mejor» la realidad. «Italia ha salvado a decena de miles de personas en el Mediterráneo, a menudo solo, como se ha reconocido en varias ocasiones entro otros al mas alto nivel de la UE», ha defendido.
«Gracias a nuestra contribución decisiva, se ha producido un descenso del 52 por ciento en las víctimas de naufragios en el Mediterráneo desde principios de 2018″ en comparación con 2017 algo de lo que, ha asegurado el Ministerio, se sienten «orgullosos«.
«Y estamos orgullosos de que nuestros esfuerzos —humanitarios, políticos, diplomáticos, financieros, materiales— hayan determinado la contracción de un 80 por ciento de los desembarcos de migrantes en las costas italianas y, por tanto, europeas, en los últimos doce meses», ha remachado el Ministerio que dirige Enzo Moavero.