¿Por qué precisamente el fin de año es el mejor momento para vender máquinas usadas? Además de las ventajas fiscales y contables, la venta en esta época ofrece la oportunidad de recuperar espacio y presupuesto para las inversiones del año entrante. A eso se suma: la gran demanda a fin de año facilita encontrar un comprador a corto plazo y alcanzar buenos precios.
En muchas empresas, el final del año es el momento de hacer balance y sentar las bases del año nuevo. Precisamente ahora se ofrece la ocasión de vender las máquinas que no se usan y ocupan espacio en el taller. Es el momento ideal para vender máquinas que no se usan y para ello nos atenemos a cinco motivos fundados.
Motivo 1: Aprovechar las ventajas fiscales
La venta de máquinas antes del cambio de año puede reducir la carga fiscal, pero también abre posibilidades de amortización. Sobre todo en las empresas del sector industrial se pueden optimizar los gastos y situar las pérdidas y ganancias de forma estratégica en el año corriente. Así se procura una base limpia sobre la que se planifican los gastos del año siguiente.
Motivo 2: Optimizar el balance del año que finaliza
La venta de máquinas que no se usan libera capital y reduce el inventario: un recurso valioso para empresas productivas con un parque de máquinas amplio. Este paso limpia el balance, mejora la liquidez y crea una base financiera sólida para el cierre del año.
Motivo 3: Crear espacio para tecnología moderna para el año entrante
Las máquinas que ya no tienen un uso activo ocupan demasiado espacio en la superficie productiva. Mediante la venta, las empresas pueden crear espacio para realizar modernizaciones y cambios en la producción para el año siguiente.
Motivo 4: Presupuesto para nuevas adquisiciones
La venta de máquinas innecesarias refuerza los presupuestos para nuevas inversiones, porque las empresas competitivas ya planifican sus inversiones para el año siguiente.
Motivo 5: Buenas condiciones de mercado para vendedores
Precisamente al final del año aumenta la demanda de máquinas disponibles a corto plazo, ya que muchas empresas aún quieren transformar sus presupuestos en inversiones. Las máquinas usadas tienen la ventaja de estar disponibles inmediatamente, mientras las máquinas nuevas de fábrica pueden ser susceptibles de fabricarse a demanda. Aquellas empresas que quieren invertir en poco tiempo acuden directamente al mercado de la maquinaria usada. Todos estos motivos, que incrementan la demanda, convierten el final del año en el momento idóneo para la venta con beneficios de las máquinas.
Para ello se necesita un socio con el alcance adecuado. La colaboración entre las casas de subastas Surplex y Troostwijk conforma un equipo fuerte en la Europa continental. Los compradores se benefician así de la mayor red de compradores de la región: máquinas metalúrgicas, de carpintería, de construcción y agrícolas, para la industria alimentaria, la farmacia, el transporte y la logística.