Coincidiendo con el inicio de la campaña turística, el número de desempleados se ha reducido en 365.300 personas en el segundo trimestre y alcanza ya los 2,7 millones, el dato más bajo desde el tercer trimestre de 2008. Las estadísticas son incluso más positivas en lo que respecta a la creación de empleo: tras sumar 603.900 trabajadores entre abril y junio, el total de ocupados supera por primera vez los 21 millones, cifra nunca antes vista en nuestro mercado de trabajo.
Así lo refleja la última Encuesta de Población Activa (EPA), publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística. Tras un mal arranque del año, en el que se contabilizaron 100.000 desempleados más y se destruyeron 11.100 empleos, España se ha repuesto en tiempo récord del golpe de la pandemia primero y de las consecuencias de la guerra en Ucrania. De esta forma, la tasa de paro se sitúa ya por debajo del 12%, mientras que la de actividad roza el 60%.
Todo ello mientras vuelve a crecer la población activa, que también se sitúa en niveles nunca antes vistos: tras crecer en el segundo trimestre en 238.600 personas, el número de trabajadores que tienen o buscan empleo se elevó hasta los 23,82 millones. Así, el número de mujeres activas subió en 58.400, mientras que el de hombres lo hizo en 180.200.
Desde el Ministerio de Asuntos Económicos celebran este nuevo máximo histórico en el número de personas ocupadas, lo que a su juicio refleja «la fortaleza y el dinamismo de la economía española», y a su vez «favorece a familias y empresas». «Aumenta la población activa, crecen los ocupados y bajan la temporalidad y el desempleo, con especial incidencia en el paro juvenil y femenino, que alcanza tasas de 2008», han señalado.
«Datos extraordinarios que demuestran la fortaleza de nuestra economía«, ha añadido en un mensaje en su cuenta de Twitter el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez.
España supera por primera vez los 21 millones de ocupados
Las contrataciones por la Semana Santa, unido a la cercanía con el verano y a unas temperaturas atípicas para esa época del año, han impulsado las contrataciones hasta cifras récord. Solo entre abril y junio se crearon 603.900 puestos de trabajo, una cifra muy superior a la media de los años previos a la pandemia (alrededor de 370.000) y lejos del máximo alcanzado en 2018 (469.900).
De hecho, como anticipaban los datos de afiliación y paro registrado de junio, la primera mitad del año ha sido una de las mejores de la historia en términos de empleo: solo en los primeros seis meses se han sumado 592.800 ocupados, lo que ha permitido cerrar el semestre con 21.056.700 de ocupados. Del total de asalariados, el 3,9 % tiene un contrato fijo discontinuo (695.300 personas).
Con este ritmo de crecimiento, es previsible que el dato de contabilidad que se conocerá este viernes arroje una aceleración en el Producto Interior Bruto (PIB) después del 0,6% logrado a comienzos de año.
El empuje de los servicios explica gran parte de este repunte. Y es que en el segundo trimestre del año se han contabilizado 606.000 personas más trabajando en este sector, frente a los 60.900 ocupados que suma la Construcción y los 1.500 en la Industria. Por contra, la Industria pierde 64.500 ocupados.
Por sexos, el empleo aumentó en el segundo trimestre en 332.200 hombres y 271.800 mujeres, hasta alcanzar el máximo histórico de mujeres ocupadas (9.799.600). En cuanto a los empleadores, la mayor parte de los puestos de trabajo generados entre abril y junio corresponden al sector privado, que contabiliza 610.000 ocupados más que en el primer trimestre, mientras el sector público perdía 6.200. «Los datos son espectaculares (…) indiscutiblemente buenos en cantidad y calidad», ha señalado el secretario general de Comisiones Obreras (CC.OO.), Unai Sordo, en una entrevista en RNE.
En lo que respecta a los trabajadores por cuenta propia, se registró una subida de 97.300 este trimestre. El presidente de ATA, Lorenzo Amor, ha tildado de «buena noticia» las cifras, si bien asegura que le preocupa «ver cómo la industria y la agricultura pierden empleo en el último año».
La cara más amable de la estadística la representan los datos de contratación indefinida, impulsada desde la puesta en marcha de la reforma laboral. El número de trabajadores con un contrato indefinido alcanzó la cifra récord de 14,7 millones, tras sumar 410.100 rúbricas a lo largo del trimestre. En el caso de los temporales, se firmaron 95.400 entre abril y junio, lo que elevó la tasa de temporalidad hasta el 17,32%.
De la misma forma, el número de horas trabajadas marca un nuevo récord desde 2008, pero solo aumentan un 1,8%, el menor incremento en un año.
El paro se reduce en más de 300.000 personas y deja la tasa en el 11,6%
El dinamismo en el empleo provocó también una reducción del número de parados nunca antes vista en este trimestre desde que hay registros. Entre abril y junio el paro se redujo el desempleo en 365.300 personas, superando el máximo descenso histórico alcanzado en 2017 (340.700).
Esto permitió reducir el número de parados por debajo de los tres millones de parados en tan solo un trimestre, pasando de 3.127.800 a comienzos de año hasta los 2.762.500 hasta junio. O, lo que es lo mismo: la tasa de paro ha pasado del 13,26% al 11,6%, la más baja desde el tercer trimestre de 2008.
La peor parte de la estadística corresponde a la tasa juvenil. El paro entre los menores de 25 años ha descendido dos puntos hasta el 27,94%, lo que supone la tasa más baja en quince años (desde el tercer trimestre de 2008), si bien nuestro país aún sigue estando a la cabeza de la Unión Europea. En concreto, el número total de jóvenes desempleados bajó a 467.600 personas, 7.000 menos respecto al trimestre anterior.
Por sectores, la caída en el desempleo fue generalizada, si bien los servicios (208.600) y la construcción (23.000) presentaron los mayores descensos. Y, por sexos, el número de mujeres que buscaban un empleo durante el segundo trimestre disminuyó en 213.300, hasta las 1.485.000 -es la primera vez desde el segundo trimestre de 2008 que baja por debajo de los 1,5 millones-; mientras que los hombres parados bajaron en 152.000, hasta los 1.277.400.
Por último, el paro en el segundo trimestre bajó en todas las comunidades, si bien las caídas más pronunciadas se produjeron en Cataluña, con 70.400 desempleados menos; Islas Baleares, con 68.600; y la Comunidad de Madrid, con 49.900. Así, Andalucía y Extremadura vuelven a liderar las tasas de paro en España, con un 18,05% y un 17,05%, respectivamente; mientras que País Vasco repite como la región con la tasa más baja (7,13%), muy cerca de Islas Baleares (7,15%).
La EPA del segundo trimestre de 2023 también revela una caída en el número de hogares con todos sus miembros en paro de 139.300, hasta situarse en 916.000, su menor cifra desde el cuarto trimestre de 2008. De compararse con el mismo trimestre de 2022, el número de hogares con todos sus miembros activos en paro se ha reducido en 74.300.
Por su parte, el teletrabajo ha marcado máximos desde finales de 2021. Entre abril y junio, 1.527.800 ocupados trabajaron desde su domicilio más de la mitad de los días, el equivalente al 6,3% del total de ocupados. Son 121.600 trabajadores más de los que teletrabajaron en el segundo trimestre de 2022, si bien representan casi la mitad de los que teletrabajaban en el punto álgido de la pandemia, cuando 3 millones de ocupados desarrollaron su actividad a distancia.
