Renfe estudia implementar medidas para regular el uso de los abonos gratuitos de media distancia, con el fin de evitar que los usuarios reserven billetes y luego no realicen el trayecto, tal como sucede actualmente.
Así lo han confirmado fuentes de la compañía, después de recibir las quejas de muchos usuarios, que no tienen posibilidad de reservar nuevos billetes porque los horarios están completos, si bien los vagones finalmente se quedan vacíos. «Sobre la mesa se están trabajando diferentes alternativas, pero hasta que no estén definidas no las podemos hacer públicas», señalan.
Entre ellas, se barajan medidas relativas a «la incautación de la fianza» y «la anulación del bono en los casos más graves», junto a otras que «se detallarán una vez se cumplimenten todos los trámites e informes jurídicos necesarios».
La gratuidad de los abonos gratuitos para viajar en trenes de media distancia entró en vigor el pasado 1 de septiembre y únicamente están supeditados al pago de una fianza de 20 euros que se devuelven al finalizar la promoción a partir del 31 de diciembre, siempre que el usuario demuestre que ha realizado al menos 16 viajes hasta final de año.
Las mismas fuentes señalan que, a pesar de ese «pequeño porcentaje de mala utilización», en torno al 10 %, en dos meses se han movido en Media Distancia más de cinco millones de clientes, lo que significa un crecimiento del 20 % respecto al período anterior a la COVID-19.
Ya aprobó restricciones en septiembre
No es la primera vez que Renfe toma medidas en este sentido. El pasado 20 de septiembre, la compañía modificó su sistema de reservas de los abonos gratuitos al detectar un «mal uso» de los mismos.
Y es que había usuarios que reservaban plazas en todos los trenes disponibles para una misma ruta, tanto de ida como de vuelta e incluso durante toda una semana, para luego elegir en el último momento cuál ocupar. Así esas plazas no se llenaban y los trenes iban medio vacíos, pese a estar las reservas prácticamente agotadas.
Así, se restringió a cuatro el número máximo de formalizaciones al día (por si una persona tiene turno partido en la empresa y vuelve a casa a comer) y, además, prohibió reservar varias idas hasta que no se haya completado la vuelta.
Estas restricciones buscaban impedir casuísticas como las de usuarios que reservaban billete en un tren y sucesivos por si los perdían por cuestiones de tiempo. Antes, esto suponía una penalización económica y los viajeros anulaban las reservas que no iban a usar, algo que ahora ya no hacen al ser los trayectos gratuitos con los abonos.
El Gobierno mantendrá el abono gratuito en 2023
Pese a estos abusos, el Gobierno prorrogará el abono gratuito de Cercanías, Rodalies y Media Distancia de titularidad estatal durante el año que viene, tal como se recoge en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2023.
En principio iba a estar vigente desde el 1 de septiembre hasta el 31 de diciembre. No obstante, la titular de Hacienda, María Jesús Montero, anunció que se extenderían el año que viene para contemplar cuál es su impacto económico y medioambiental, y que se evaluará en diciembre de 2023.
