Cambia el perfil de la pobreza en España, más de 13 millones de personas están en riesgo

El perfil de la gente que está en riesgo de pobreza ha cambiado «a peor». Cada vez son más y en esta situación de riesgo ya se encuentran más de 13 millones de personas en nuestro país, son 3 de cada 10 españoles lo que significa un 1% más que el año anterior.

Las colas del hambre cada vez son más extensas y es que los datos son demoledores: casi la mitad de los españoles, el 45%, llega con dificultad a final de mes y el 33% de los hogares no pueden afrontar los gastos «imprevistos».

Paco es un ejemplo de aquellos que están en el grupo de más de la mitad de la población española que vive muy cerca del límite de sus posibilidades. El contexto lo completan sueldos precarios e insuficientes que dificultan la llegada a final de mes.

Pese a la crudeza de las cifras el coordinador del informe, Juan Carlos Llano, señala que «las medidas de contención enmarcadas en el llamado escudo social contribuyeron positivamente a paliar buena parte de las consecuencias previstas de la crisis». La pobreza aumentó en unas 319.000 personas, inferior a las estimaciones que vaticinaban que la pobreza severa podría aumentar en casi 800.000. Sin embargo, estas medidas como los ERTES o el ingreso mínimo vital todavía llegan de forma desigual a quienes se encuentran en pobreza severa o cerca de ella.

En este último informe se acentúa la subida de personas con empleo y estudios que se encuentran en riesgo de pobreza y tener hijos sigue siendo un importante factor de riesgo de pobreza y exclusión, como demuestra que los hogares en los que viven menores tienen tasas más altas en los principales indicadores que aquellos donde hay adultos solamente, sobre todo los monoparentales, casi la mitad de los cuales están en situación de riesgo de pobreza.

El estudio muestra una España dividida en dos mitades: las regiones del norte tienen tasas bajas en los indicadores de pobreza y exclusión, homologables con los países más desarrollados de la UE, mientras que las comunidades y ciudades del sur muestran tasas muy elevadas.