¿Qué es la deflactación de la renta que ponen en marcha País Vasco, Andalucía y Madrid?

El debate político en España no solo se centra en el impuesto de patrimonio o en el de sucesiones. Ante la escalada de los precios, País Vasco, Andalucía y la Comunidad de Madrid han puesto en marcha lo que se conoce como deflactación de la renta, una medida que trata de eliminar los efectos producidos por la inflación, es decir, que si un asalariado mejora su sueldo, no pague un mayor porcentaje de impuestos. El PP insta al Gobierno a aplicarlo sobre las rentas inferiores a 40.000 euros, pero la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, asegura que la medida no combate la inflación y no afecta a los más vulnerables.

La ministra de Hacienda acusa al PP de defender «los intereses de los más poderosos»

La ministra, ante la proposición de deflactar el IRPF, ha acusado al PP de defender «los intereses de los más poderosos». «Ustedes lo que hacen es perdonar los impuestos a la banca, a las energéticas y a los grandes patrimonios y cargarlos sobre la renta media y trabajadora de este país», ha señalado durante la sesión de control al Gobierno en el Senado, después de que esta semana el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, anunciara la supresión del Impuesto de Patrimonio en la comunidad autónoma.

Sobre esta decisión, Montero ha criticado que Moreno haya decidido «perdonar» los impuestos al 0,2% de los ciudadanos de Andalucía frente al 99,8% que se beneficiaría de 120 millones de euros que ser recaudan para la sanidad, la educación o la dependencia. La senadora del PP, Amelia Salanueva, ha asegurado que, ante el actual episodio inflacionista, se debe aplicar la medida de deflactar el IRPF.

Los socios de gobierno debaten la deflactación del IRPF

«No hacerlo es una subida de impuesto por la puerta de atrás y en absoluto silencio», ha alertado la senadora del PP, quien asegura que esta medida la apoya no solo su partido, sino también expertos del campo. Frente a esto, Montero ha asegurado que esta medida no combate la inflación, no afecta a las personas más vulnerables –ya que están exentas de la declaración del IRPF– y supondría también «perdonar» el impuesto a las rentas por encima de 40.000 euros.

«Si se deflactan los tramos inferiores también repercute en la renta más altas del país», ha explicado en este sentido la titular de Hacienda. «Ustedes proponen bajadas fiscales, que significa dejar al descubierto la mayor garantía de seguridad que tienen los ciudadanos de clase media y trabajadora como es el Estado del bienestar», ha argumentado la ministra. Pero el Ejecutivo empieza a quedarse solo en este asunto. Sus socios de gobierno, Unidas Podemos, lo han propuesto en la Comunidad de Madrid y el Ejecutivo vasco, del que forman parte los socialistas, ya lo ha puesto en marcha.