La desigualdad de la COVID: de los 573 nuevos milmillonarios a los 263 millones de personas en pobreza extrema

La asociación Oxfam Intermón denuncia que en los dos años de pandemia han aparecido en el mundo hasta 573 nuevos milmillonarios, lo que supone un nuevo milmillonario cada 30 horas. Así se recoge en el informe ‘Beneficiarse del sufrimiento’, hecho público este lunes con motivo de la reunión del Foro Económico Mundial en la ciudad suiza de Davos.

En este documento, también se expone la otra cara de la moneda y señalan que 263 millones de personas adicionales podrían verse sumidas en la pobreza extrema y vivir con menos de dos dólares al día, revirtiendo así décadas de progreso.

Desde la organización denuncian que la desigualdad no ha parado de crecer con la llegada de la pandemia y que ahora se ve agravada por la subida de precios. «La riqueza de los milmillonarios se ha disparado durante la pandemia de la COVID-19 en gran medida debido a los beneficios extraordinarios de grandes empresas de los sectores farmacéutico, energético, tecnológico y alimentario», indica el informe.

El aumento de precios afecta más a los colectivos vulnerables

En concreto, ha apuntado que hay cuatro nuevos milmillonarios mientras la riqueza de los que ya lo eran antes de la pandemia ha crecido a un ritmo de 6,8 millones de euros al día.

Sin embargo, los colectivos más vulnerables se enfrentan a una «situación especialmente delicada», según ha explicado el coordinador de investigación de la Oxfam, Íñigo Macías, porque a los coletazos de la crisis del 2008, se ha unido la pandemia y «no nos hemos terminado de recuperar cuando llega el aumento de precios».

Desde la asociación, señalan que esta subida del coste de la vida afecta en mayor medida a las familias con menores ingresos. «La inflación entiende de clases, no es inocua, las familias con menos ingresos tienen que destinar una mayor parte de su renta a bienes básicos», ha recalcado Macías.

Gravar la riqueza obtenida por los beneficios extraordinarios

Para paliar esta situación de desigualdad, Oxfam propone la aplicación de impuestos excepcionales sobre las ganancias inesperadas en contextos de crisis, así como una agenda de reformas fiscales que graven de manera más eficiente y recurrente la riqueza.

El informe afirma que a los más ricos, «no solo no les afectan las crisis, sino que, objetivamente, los milmillonarios se han beneficiado de ellas. Su riqueza se ha disparado, en gran parte, por las exorbitantes sumas que los Gobiernos han inyectado en la economía global.» Por ello, agrega, los Gobiernos deben tomar medidas urgentes para poner freno a la riqueza extrema.

Deben elevar sin demora la tributación sobre la riqueza, el capital y los beneficios «caídos del cielo» de grandes empresas, e invertir este dinero en la protección de la población con mayores necesidades y en la reducción de las desigualdades y el sufrimiento. «Hablamos de medidas que se puedan poner en marcha ahora mismo», ha indicado Macías.

Según datos de Oxfam: la riqueza de los milmillonarios se ha incrementado tanto en los últimos 24 meses como lo ha hecho en 23 años; la economía de los milmillonarios de los sectores de la energía y la alimentación ha crecido 1.000 millones de dólares cada dos días, y los precios de los alimentos y la energía han alcanzado los niveles más altos en décadas.

Para paliar esta situación reclaman impuestos sobre los beneficios «caídos del cielo» de grandes empresas en tiempos de crisis, tributos excepcionales y de solidaridad sobre las grandes fortunas o tasas recurrentes sobre la riqueza y las ganancias de capital.

«Un impuesto progresivo de tan solo el 2 % sobre el patrimonio neto por encima de los 5 millones de dólares, que pasase al 3 % para patrimonios por encima de los 50 millones y al 5 % por encima de los mil millones permitiría recaudar 2,52 billones de dólares en todo el mundo», propone la ONG.