Un tuit de Elon Musk basta para provocar pérdidas o ganancias millonarias a empresas e inversores. Revalorizar la cotización de una empresa y salvarla de la quiebra, comprar una red social a golpe de talonario o disparar el valor de una criptomoneda son algunas de las acciones con las que el multimillonario ha revolucionado el mercado financiero a golpe de tuit.
La última ha llegado este viernes. A primera hora de la mañana, el hombre más rico del mundo ha sorprendido a todo el planeta tras anunciar que iba a paralizar temporalmente la compra de Twitter tan solo un par de semanas después de haber anunciado su adquisición por 44.000 millones de dólares. Inmediatamente después, la cotización de la red social se ha desplomado un 20%
Así ha sido el último impacto en la economía mundial que ha provocado el excéntrico Musk. Pero en los últimos años está acostumbrado a provocar grandes terremotos financieros con un simple mensaje y sin ser necesariamente muy específico.
Twitter y Bitcoin, dos temáticas habituales en su perfil
Con cerca de 100 millones de seguidores en la red social que ahora duda en comprar, Musk ha sido uno de los multimillonarios abanderados del mundo de las criptomonedas que justo ahora acaba de sufrir una caída histórica.
A finales de enero de 2021, decidió cambiar su biografía en Twitter por la palabra «Bitcoin». Lo que sucedió acto seguido provocó un movimiento de miles de millones de euros: el valor de la principal criptomoneda se disparó más de un 20% y se elevó a valores históricos nunca antes vistos.
Ahora, los inversores que decidieron seguir los pasos de Musk por un simple cambio de estado en su biografía, se ven en la encrucijada de asumir enormes pérdidas tras la gran caída que lastra la moneda digital en esta última semana, de hasta un 32% de su valor.
Pero ese no fue su único movimiento con las ‘criptos’. Un año y medio antes de esta caída histórica y en medio de la ‘criptofiebre’, Musk publicó una foto en Twitter del logo de Dogecoin, una criptomoneda desconocida hasta el momento y que a partir de ahí multiplicó su valor convirtiéndose en una de las referencias en este mercado tan volátil.
Y es que su relación con los criptoactivos es imposible de entender sin su perfil de Twitter. En marzo de este año y en medio de rumores sobre una posible venta por su parte de los bitcoins que poseía, el magnate decidió darle otro impulso, justo cuando el futuro de las ‘criptos’ parecía complicado.
«Todavía tengo y no venderé mi Bitcoin, Ethereum o Dogecoin», señaló en un tweet publicado el 14 de marzo de 2022. Con ese mensaje el valor subió entre un 4 y 10% de manera inmediata y rozó máximos de este año.
Enlaces y acrónimos para ejercer su poder de manera indirecta
En otras ocasiones ha decidido no ser tan directo. En 2021 la tienda de videojuegos Gamestop estaba al borde de la quiebra y Musk optó por publicar un mensaje usando un acrónimo: «Gamestonk». En ese mensaje, Musk enlazó a un foro de Reddit en el que se animaba a comprar acciones de la empresa.
Con ese juego de palabras entre ‘Gamestop’ y ‘stonk’, término financiero que se utiliza para comprar activos, animó sutilmente a comprar las acciones de la empresa. En pocos segundos el tweet tuvo cerca de 300.000 respuestas inmediatas, y en el foro se multiplicaron los mensajes diciendo que Musk los apoyaba. Las acciones subieron como la espuma y la empresa libró la quiebra.
También subió el valor de las acciones de Twitter y Dogecoin el día que anunció que compraba la red social con un mensaje en su perfil. Antes de abrir Wall Street la compañía se apuntó unas ganancias del 5% y parecía que abría una nueva etapa en la era de las redes sociales con el hombre más poderoso del mundo al frente.
Menos de un mes después, el multimillonario ha paralizado nuevamente a golpe de tuit la nueva era, mostrando que él, sin ser dueño directo, es capaz de hacer ganar o perder a millones de personas en cuestión de segundos dándole al botón de «enviar».