El precio del carburante se mantiene por encima de la barrera de 1,60 euros. Este jueves, el precio medio de la gasolina de 95 es de 1,637 euros por litro, mientras que el gasóleo se vende a 1,672 euros, una vez aplicada la rebaja de 20 céntimos por litro aprobada por el Gobierno y convalidada el pasado 28 de abril. Así, el diésel sube un 1,5% respecto a la semana anterior (dos céntimos más), mientras que la gasolina es un 1,2 % más cara (casi tres céntimos).
Con estos precios, el coste del gasóleo vuelve a superar por quinta semana consecutiva al de la gasolina, una tendencia que comenzó el último día de marzo y que no se veía desde el año 2011.
No obstante, si se excluye esta bonificación, la gasolina alcanza 1,837 euros el litro, el segundo valor más alto de la historia, mientras que el gasóleo marca 1,872 euros, un nuevo récord, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea.
En este contexto, los usuarios siguen buscando las estaciones de repostaje más económicas para su bolsillo.
Llenar el depósito: hasta 33 euros más caro que en 2021
Con los precios actuales, llenar un depósito medio de 55 litros con gasolina cuesta actualmente 90 euros, mientras que con gasóleo alcanza los 92 euros, lo que supone pagar cerca de 25 euros más que a principios de 2021 si se utiliza gasolina, y 33 euros si se elige gasóleo. Con la aplicación de la rebaja del Ejecutivo, los consumidores se ahorran cerca de 11 euros al llenar un depósito de este tipo, tanto si eligen gasolina como si optan por diésel.
En comparación con la misma semana de 2021, la gasolina cuesta ahora un 23% más, frente al 41% que ha subido el gasóleo, mientras que si se analizan los precios de la misma semana de 2019, antes de que estallara la pandemia, la gasolina es un 21% más cara y el gasóleo un 25%.
A pesar de estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 está en España por debajo de la media de la Unión Europea, situada en 1,87 euros el litro, y de la zona euro, con un precio medio de 1,882 euros. En el caso del diésel ocurre algo similar, ya que el precio en la UE es de 1,939 euros y de 1,921 euros en la zona euro.
El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe a que España, a pesar del IVA y los mayores gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal, en general, que la media comunitaria.
Más de un mes con la rebaja del carburante
Desde el 1 de abril, los conductores se benefician de una rebaja directa de 20 céntimos como mínimo por litro de combustible (el Ejecutivo asume 15 céntimos y las petroleras, un mínimo de 5). Este mecanismo, convalidado en el Congreso el pasado 28 de abril, está dentro del Plan Nacional ‘anticrisis’ para hacer frente a los daños económicos derivados de la guerra en Ucrania.
En el caso de la rebaja de la gasolina, esta se aplica directamente en el momento de pago en las estaciones y supone un alivio para sus bolsillos de los clientes, pero que, según muchos, sigue siendo insuficiente.
En el lado de las gasolineras, algunas no han aceptado de buen grado cómo se ha aplicado esta medida. La Confederación Española de Estaciones de Servicio (CEEES) denuncia que está «mal articulada» y no mitiga los «problemas de liquidez» que están teniendo muchas estaciones. En esta línea, la patronal ya anunció el 6 de abril que iba a recurrir este Decreto Ley del Gobierno a la Justicia.
Conforme avanzaron los días, el 20 de abril la CEEES aseguró que las estaciones ya habían agotado el anticipo de Hacienda por haber vendido un 35% más de carburante después de una Semana Santa que este año ha alcanzado 15,8 millones de viajes por carretera, según la DGT, la cifra más alta desde 2008 y un 6% más que en 2019.
El director general de la patronal, Nacho Rabadán, explicó ese día que «el dinero anticipado apenas cubre la mitad del importe que tienen que adelantar» y «no hay flujo de caja». Además, advirtió que si no reciben los anticipos en mayo y junio podrían tener que cerrar cientos de gasolineras, «hasta la mitad de la red».
Facua denuncia a más de 200 gasolineras por subir los precios
Por otra parte, Facua-Consumidores en Acción denunció el 6 de abril a 230 gasolineras por subir sus precios el mismo día en el que comenzó a aplicarse el descuento en al menos cinco céntimos por combustible.
La organización pidió al Ministerio de Consumo que abriera expedientes sancionadores contra estas estaciones. Al no recibir respuesta de Consumo, tal y como recalcó, el 13 de abril llevó esta denuncia a las autoridades de protección al consumidor autonómicas, con competencias sancionadores.
Pendiente del precio del petróleo
La subida del precio del diésel y la gasolina se ha registrado en el contexto del repunte de la cotización del barril de Brent –de referencia para Europa-, que después del comienzo de la guerra en Ucrania alcanzó los 131 dólares por barril.
En la mañana de este jueves, el precio del barril se situaba por encima de los 110 dólares, con un ascenso superior al 0,4%, mientras que el barril de petróleo WTI, de referencia para EE.UU., crecía un 0,25%, hasta los 108 dólares.
Sin embargo, cabe destacar que el precio de los carburantes depende de diversos factores, como su cotización específica (independiente de la del petróleo), la evolución del crudo, los impuestos, el coste de la materia prima y de la logística y los márgenes brutos. Así, la evolución en la cotización del crudo no se traslada directamente a los precios de la gasolina, sino que lo hace con un decalaje temporal.