En la última década se ha transformado en España el modelo de familia. Cada vez son más pequeñas y menos tradicionales: el número de niños con padres no casados se ha triplicado y casi iguala a aquellos con progenitores que han legalizado su unión.
Sin embargo, no todos tienen los mismos derechos, según señala la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que propone medidas como una prestación universal por hijo o ampliar los permisos retribuidos de paternidad y maternidad.
En su Libro Blanco sobre la protección familiar, el organismo que agrupa a los países más desarrollados pide actualizar las medidas sociales para que abarquen a todo tipo de familias y también garantizar una protección mínima en todo el territorio español, entre un total de 40 propuestas. «Los cambios en la política no han cumplido con los cambios en la sociedad, un nuevo marco legal podría representar mejor la diversidad de las familias», ha explicado Stefano Scarpetta, el director de Empleo, Trabajo y Asuntos Sociales de la OCDE, durante la presentación del informe este jueves en Madrid.
La evaluación y las recomendaciones van a servir de base para la ley de diversidad familiar que prepara el Ministerio de Derechos Sociales para reconocer jurídicamente los distintos modelos de familias, ya que el único marco legal nacional en esta materia vigente es la Ley de 2003 sobre protección de la familia numerosa.
En la presentación del informe, la titular de esta cartera, Ione Belarra, ha recogido el guante y ha explicado que está trabajando para que la nueva ley incluya alguna de las medidas que propone la OCDE, como una «renta crianza» universal, la ampliación de los permisos de paternidad y maternidad «iguales y no transferibles» a seis meses. También ha anunciado un permiso de cuidado por persona 100 % remunerado de al menos siete días al año, para cuidar a hijos, a la pareja y los mayores.
Este documento «pone palabras a un déficit que ha arrastrado España a la hora de apoyar a sus familias», ha afirmado Belarra, que ha reivindicado la ley de familias será una de las «fundamentales» en esta legislatura, y espera que pueda ser aprobada en «los próximos meses».
Familias más pequeñas y más padres no casados
Si en la segunda mitad del siglo XX España contaba con una de las tasas de fertilidad más altas de Europa, ahora tiene la tasa más baja de la región, con 1,3 en 2018, en comparación con el promedio de la UE de 1,5.
La legalización del divorcio y la aceptación social de la convivencia no matrimonial han conformado una composición familiar más diversa, en la que han bajado los nacimientos de hijos de padres casados y han aumentado los menores que viven en familias monoparentales o reconstituidas, muestra este extenso análisis de 198 folios.
Por ejemplo, el 47 % de los niños en España tienen padres no casados, el triple que hace 10 años (era el 18 %). Sin embargo, esos cambios en los modelos familiares no se han reflejado en la evolución de las leyes en España, advierte la OCDE.
Los derechos y la protección económica de los niños cuyos padres no están legalmente casados difieren de aquellos cuyos padres están casados, alerta este organismo internacional. Para superar esas situaciones, plantea aprobar medidas dirigidas a estos nuevos tipos de familias, como las dirigidas a protección de estos hogares en caso de fallecimiento de los progenitores no casados.
Permisos retribuidos para retrasar la vuelta al trabajo
En España, han aumentado más del 50 % las madres empleadas en las últimas dos décadas. Eso hace que el modelo de familia de doble ingreso sea el dominante, aunque las mujeres continúan teniendo más responsabilidades en el cuidado y las tareas domésticas no remuneradas. No obstante, la OCDE aprecia indicios de cambios de esos patrones con la mayor disponibilidad del permiso de paternidad y la extensión de la custodia compartida.
Para este organismo, aunque el derecho de familia ha evolucionado de manera considerable, no lo ha hecho la política familiar, es decir, la combinación de prestaciones, servicios, exenciones fiscales y permisos que ayudan a los miembros de las familias a criar y cuidar a las hijas e hijos menores y otras personas dependientes. En este ámbito, ayudarían políticas como la aprobación de permisos parentales retribuidos que aseguren el cuidado de los hijos.
El 40 % de las familias monoparentales viven en la pobreza
El diagnóstico de la OCDE destaca la elevada pobreza infantil, con una tasa en España del 19,3 %, frente a la media del 12,9 % en los países desarrollados, y el bajo nivel del gasto social en familia e infancia -1,3 % del PIB, frente al 2,3 % de la UE-27-. Casi uno de cada cinco niños viven en pobreza relativa, que atribuye a una elevada tasa de familias desempleadas e insuficientes transferencias públicas.
Según el informe, urge a proteger especialmente a las familias monomarentales y monoparentales. El 40 % viven en la pobreza en España (en la OCDE es de 32 % y el 27 % entre los países europeos de la OCDE). Mejorar las tasas y la calidad del empleo de los progenitores, aumentar el gasto social dirigido a familias de bajos ingresos, ajustes en el régimen de pensiones por alimentos en caso de divorcio y servicios familiares integrados y con menos barreras de acceso, son algunas de sus recomendaciones.