La sustitución del Imperio norteamericano se puede prever que va a ser traumática, para
algunos. China se ha posicionado muy bien económica y geoestratégicamente.
Un elemento de sumo apoyo a todo esto, es sin duda alguna, la llamada Ruta de la Seda. Pues a través de ella, evidentemente, va a conseguir posicionarse en todos y cada uno de los países involucrados, y atar fuertemente lazos de unión económica, de relaciones de muchas clases etc., que de una manera indudable, va a abocar que China se perpetúe en esa posición de liderazgo mundial y sea difícil removerla de ahí.
Hay que tener en cuenta además que también a través de la Organización de Cooperación de
Shanghái, ha creado una relación con Rusia, India, Pakistán, entre otros países al que ahora se
pretende incorporar a Irán y a Afganistán, que obviamente va a dominar gran parte de Asia, lo
cual le va a permitir, obviamente, que su potencia económica, con el nivel de fabricación
mundial que posee, la producción de crudo petrolífero, minerales esenciales y tierras raras sea
indiscutible; relegando así a la Unión Europea e incluso los Estados Unidos de América, a un
segundo plano y bastante alejado.
Con este escenario, y viendo que ese eje económico, se debe reconocer que realmente, a decir
verdad, no tiene ninguna estima por las libertades de las personas que la integran. Se puede
colegir con facilidad que corren malos tiempos para la libertad del individuo.
Aunque creo que aún existe alguna posibilidad para lo que se ha venido llamando » Mundo
Libre «. Estoy convencido que todavía hay tiempo para realizar un movimiento tendente a que
se implemente una Unión, que haga fuerte económicamente a otro eje, que debería ser
creado entre Estados Unidos de América con Canadá, todo el Sur de América y Centroamérica,
Europa, incluido Reino Unido y países que pudieran adherirse en África y Asia. Para ello
evidentemente, se debería crear una pertinente alineación de intereses para poder ir en un
mismo sentido. Aunque estoy convencido que ello debe pasar por la creación de una Sociedad
en la que la mayoría de sus integrantes alcancen su óptimo y se origine un Estado del
Bienestar, que coadyuve a ello. Además, para controlar mejor la cadena de suministro, se
deberá primar a que la fabricación se realice en esa Zona y además, con la mayor fuerza de
trabajo posible y así de esta manera, no se ocasione un Paro masivo que aboque a una
Sociedad distópica. Aunque para ello se deba dejar de obtener unos beneficios empresariales,
que indefectiblemente es obvio, que redundan en una entropía social, si se pretende, como
hasta ahora, conseguir el máximo beneficio dejando de lado a los individuos que integran la
Sociedad.
Josu Imanol Delgado y Ugarte. Economista