De cumplirse las previsiones del Banco Mundial, sería el mayor rebote luego de una recesión en 80 años.
El Banco Mundial ha revisado al alza sus previsiones de crecimiento para la economía mundial, que crecerá este año un 5,6% y un 4,3% en 2022, en lo que representa el mayor ritmo de expansión tras una recesión en los últimos 80 años, gracias principalmente al rebote de las economías avanzadas, lideradas por Estados Unidos.
Las nuevas proyecciones de crecimiento del Banco Mundial representan una revisión al alza respecto de los pronósticos del pasado mes de enero de 1,5 puntos porcentuales en el caso de 2021 y de medio punto porcentual en la previsión de crecimiento del PIB para 2022.
Asimismo, la institución ‘hermana’ del Fondo Monetario Internacional (FMI), puesto que ambas fueron creadas en la Conferencia de Bretton Woods en 1944, anticipa que la tasa de crecimiento del PIB mundial alcanzará el 3,1% para 2023.
En este sentido, subraya que a pesar de la reactivación esperada, a finales del año en curso el PIB mundial será alrededor de un 2% inferior a lo que se proyectaba antes de la pandemia y para 2022 las pérdidas de ingresos per cápita no se habrán revertido para aproximadamente dos tercios de los mercados emergentes y economías en desarrollo.
«Si bien existen signos de recuperación mundial que se reciben con agrado, la pandemia sigue generando pobreza e inequidad en la población de países en desarrollo de todo el mundo», señaló el presidente del Banco Mundial, David Malpass, para quien es fundamental que se lleven adelante, a nivel global, iniciativas coordinadas para acelerar la distribución de vacunas y el alivio de la deuda, en especial, para países de bajos ingresos.
En este sentido, las nuevas proyecciones del Banco Mundial suponen una importante revisión al alza de las perspectivas de crecimiento para las economías desarrolladas, que crecerán un 5,4% en 2021 y un 4% en 2022, frente a los anteriores pronósticos del 3,3% y del 3,5%, respectivamente, mientras que para 2023 se espera una expansión del 2,2%.
Estados Unidos liderará el fuerte rebote de este grupo de economías con un crecimiento del PIB del 6,8% en 2021, casi el doble del 3,5% previsto en enero, y del 4,2% en 2022, nueve décimas más de lo esperado anteriormente. De cara a 2023, la primera economía mundial crecerá un 2,3%.
De su lado, la eurozona ha visto mejorado su pronóstico de crecimiento para este año y el próximo en seis y cuatro décimas, respectivamente, hasta el 4,2% en 2021 y el 4,4% en 2022, mientras que para 2023 se prevé una expansión del 2,4%.
En el caso de las economías emergentes, el Banco Mundial espera que el PIB crezca en 2021 un 6%, ocho décimas más que preveía en enero, con una expansión del 4,7% en 2022, lo que supone una mejora de cuatro décimas respecto del anterior pronóstico. En 2023, las previsiones de la institución apuntan a una expansión del 4,4%.
China ha visto mejoradas sus perspectivas de crecimiento en seis décimas para este año y dos décimas para 2022, hasta el 8,5% y el 5,4%, respectivamente, mientras que de cara a 2023 se espera un ritmo de expansión del 5,3%.
Asimismo, el Banco Mundial ha revisado sustancialmente los pronósticos de crecimiento para la India, hasta el 8,3% en 2021 y el 7,5% en 2022, frente a las anteriores previsiones del 6,3% y el 5,2%, respectivamente. Para 2023, la institución proyecta un crecimiento del PIB indio del 6,5%.
A pesar de que se anticipa que los mercados emergentes y las economías en desarrollo se expandirán un 6% este año, en muchos países la reactivación se está retrasando porque han resurgido casos de Covid-19 y la vacunación avanza lentamente, además de que en algunos países se han retirado las ayudas públicas proporcionadas.
Asimismo, el Banco Mundial también prevé que el ingreso per cápita en muchos mercados emergentes y economías en desarrollo continuará por debajo de los niveles anteriores a la pandemia, y que las pérdidas agravarán las deficiencias vinculadas con la salud, la educación y el nivel de vida.