La normativa permitirá regular, entre otros aspectos, las operaciones con activos virtuales y procesos de autofinanciación.
Latinoamérica se adapta a las nuevas tecnologías financieras. El Senado mexicano ha aprobado una iniciativa de ley que regulará a las empresas de tecnología financiera, incluyendo operaciones con activos virtuales e instituciones de financiamiento colectivo, y ahora pasará a la Cámara Baja para su análisis y sanción.
Se espera que los diputados den su visto bueno a la iniciativa, conocida como la ‘Ley Fintech’, antes de que concluya el período ordinario de sesiones el 15 de diciembre. De lo contrario, la ley corre el riesgo de estancarse durante el próximo periodo legislativo, que arranca el 1 de febrero, en medio de la efervescencia política antes de las elecciones presidenciales y para renovar ambas cámaras del Congreso el próximo año.
Los senadores aprobaron que las Instituciones de Tecnología Financiera (ITF) de financiamiento colectivo, o «crowdfunding«, tengan la posibilidad de obtener créditos para financiar proyectos propios.
«No podíamos pedir créditos para fondear (financiar) créditos de la propia plataforma y ahora se abre la puerta para ello», dijo a Reuters Gerardo Obregón, fundador de Prestadero, una plataforma de préstamos persona a persona por Internet con sede en Ciudad de México. Asimismo, dijo que actualmente en México las sociedades financieras y los bancos pueden solicitar créditos para otorgar a su vez préstamos a sus clientes.
Para las ITF que realizan operaciones con activos virtuales, como criptomonedas, el proyecto de ley aprobado por los senadores incluye la posibilidad de realizar operaciones con derivados y contempla las llamadas «bifurcaciones», que dividen una moneda virtual en dos y son similares a un «split» de acciones en la bolsa de valores.
«Aunque no estamos en el negocio de derivados, para nosotros fue una victoria para el sector, porque esto se está haciendo a nivel internacional», dijo Felipe Vallejo, director de política pública y regulatoria en Bitso, una plataforma de intercambio de criptomonedas como Bitcoin.
Esta semana, el gestor del mayor mercado de derivados y futuros del mundo, la Bolsa Mercantil de Chicago (CME), anunció que comenzará a ofrecer derivados de Bitcoin.