Seleccionado por Forbes como el científico joven más influyente de Europa, el director de Innovación Asistencial del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona defiende la importancia de diseñar una Salud Pública más universal.

César Velasco es el científico más influyente de Europa. El investigador español, que aún no llega a los 30 años, ha demostrado su talento frente a la lucha contra el ébola o el VIH, lo que le ha permitido ser un referente nacional e internacional de la investigación y de los esfuerzos globales en materia de Salud Pública y prevención. Aún con toda una carrera profesional por escribir, la joven promesa ya cuenta con la experiencia de haber formado parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del Centro Europeo de Control de Enfermedades.

Sin embargo, el gran sueño del director de Innovación Asistencial del Vall d’Hebron es conseguir una cura contra el desconsuelo. “Siempre he pensado que deberíamos inmunizarnos todos frente a la tristeza, ponernos una vacuna de la felicidad o al menos del optimismo, aunque la realidad actual es bien difícil para muchas personas”, afirma a IberoEconomía.

¿Cómo fueron tus inicios en el mundo de la Medicina? ¿Pasión desde niño o tradición familiar?

Cuando decidí estudiar Medicina intenté combinar tres aspectos que eran importantes en mi vida. Por un lado, la vocación de trabajar para las personas; por otro, la curiosidad científica; y por último, la creatividad. Siempre he pensado que la ciencia y el arte son herramientas que se pueden combinar.

Descubrí que mejorar la Salud a nivel global es un reto compartido, que requiere visión de futuro y estrategias de Salud Pública. Gracias a la investigación desarrollamos nuevas soluciones con mucho impacto en salud y que mejoran la vida de las personas. Contando con una formación universitaria pública de calidad, he tenido la oportunidad de trabajar internacionalmente e impulsar grandes proyectos.

Eres considerado un ‘influencer’ sanitario, ¿cómo es la clave para destacar a tan temprana edad en el ámbito sanitario?

En todos los equipos en los que he trabajado, lo importante era la profesionalidad y la entrega de cada uno de nosotros. Cada vez se le da más importancia a la experiencia y la formación y menos a la edad, es cuestión de tiempo que nos deje de parecer un factor tan determinante.

Quizá nos sorprende menos cuando vemos que grandes empresas multinacionales en otros sectores están lideradas por personas de nuestra generación. Tengo un gran respeto por la gente mayor, con muchos años de experiencia, con su veteranía transmiten conocimiento continuamente. La sociedad debe asumir que la conjunción de diferentes generaciones, profesiones y procedencias genera riqueza.

¿Qué representa estar presente en los listados de Forbes? ¿Cómo ha repercutido en tu carrera profesional?

Con respeto y responsabilidad. Me invadió una sensación de vértigo que me impulsó a continuar trabajando, asumiendo responsabilidades y retos que me exigen dar el 100 por cien. Para mi es una responsabilidad representar de algún modo a una generación que se ha esforzado mucho por formarse y aportar valor. Es una alegría que una lista del prestigio de Forbes seleccione a un profesional de la salud, del ámbito de la Salud Pública, creo que en parte refleja que la sociedad está cambiando sus valores.

¿Cuáles son los principales aprendizajes que obtuviste dentro de los proyectos realizados para la Organización Mundial de la Salud (OMS) o el Centro Europeo de Control de Enfermedades?

Trabajando en organizaciones como la OMS o el ECDC te das cuenta de la envergadura internacional de la salud. Cada vez más, los retos de salud pública, investigación y asistencia sanitaria se deben enfrentar de manera global. La sociología, la economía, las crisis humanitarias, la globalización o el calentamiento global afectan mucho a la salud de la población. Del mismo modo, las soluciones deben ser interdisciplinares y enfocadas a la prevención y la búsqueda de nuevas estrategias.

¿Cuál es la gran meta que persigues como director de Innovación Asistencial en el Vall d’Hebron Hospital Campus?

El nivel de los profesionales sanitarios de nuestro Campus es muy alto y necesitamos más iniciativas disruptivas, que faciliten la incorporación nuevas soluciones y la implementación de nuevas ideas. Los profesionales de todas las disciplinas y ámbitos de nuestro hospital realizan una gran labor asistencial e investigadora, pero además contribuyen a buscar soluciones a los retos que surgen en el día a día de un centro dedicado a los pacientes. Estas innovaciones se han de fomentar, ya que contribuyen a mejorar el trabajo que hacemos.

¿Cuál consideres que es el gran reto del Sistema Nacional de Salud?

El Modelo de Sanidad Pública que conocemos es un gran activo que debemos conservar. Es fundamental conocer que gracias a la Sanidad Pública los ciudadanos podemos acceder a una atención sanitaria de calidad y garantiza que los usuarios tengan los recursos a su disposición de manera gratuita, promoviendo la equidad. Sin embargo, el Sistema Sanitario debe adaptarse a múltiples retos de futuro.

La evolución continua de la sociedad y la revolución digital hacen necesaria la mejora continua y la sostenibilidad. Uno de los mayores retos que afrontamos es el de situar al paciente en el centro de la atención sanitaria mientras aseguramos la sostenibilidad de un sistema cada vez más personalizado y de excelencia. Es fundamental conocer la experiencia de los pacientes, conocer cómo viven su enfermedad. Habremos conseguido un gran hito si somos capaces de inspirar el día a día de familiares, pacientes y profesionales de la salud.

De la gran cantidad de países donde has trabajado, ¿qué importarías a la sanidad española o a su modelo de formación?

Siempre es positivo salir de nuestra área de confort y trabajar en otros contextos y realidades para ampliar nuestro conocimiento del sistema, incluido el sanitario. Aunque tenemos que seguir saliendo al extranjero y comparándonos con para mejorar, se puede cambiar la vida de muchas personas desde el ámbito más local.

La sanidad en nuestro país y su modelo de formación sanitaria especializada están abiertas a las novedades y mejoras que se llevan a cabo a nivel global. Supone un gran reto mantener el nivel de excelencia en un sistema sanitario universal en un contexto que evoluciona de manera tan rápida.

¿Cuál es la enfermedad que te gustaría erradicar por completo del mundo?

Siempre he pensado que deberíamos inmunizarnos todos frente a la tristeza, ponernos una vacuna de la felicidad o al menos del optimismo, aunque la realidad actual es bien difícil para muchas personas. Mi recomendación es simple, evitar el sedentarismo y adoptar medidas como dietas, o ejercicio físico siempre con moderación. Una buena costumbre como el deporte intenso o el control nutricional, si se realizan en exceso puede dejar de tener efectos beneficiosos., siempre es mejor buscar el equilibrio.

Como ‘influencer’ sanitario, ¿cuál es el mensaje que te gustaría transmitir?

Animaría a la gente a que crean en su equipo, a que inspiren a quienes les rodean. Pensad en el motivo por el que empezasteis vuestra aventura y seguid adelante.

Avanzad con respeto, a los demás y a vuestro proyecto.  El esfuerzo y la capacidad de superación son necesarios. Os invito a crear una atmósfera de trabajo atractiva, a poneros en la piel de aquellos por los que trabajáis. Tened siempre la empatía como compañera de viaje, estad despiertos a los cambios, y afrontad los nuevos retos con nuevas soluciones que nunca antes habíais imaginado.