Así descubrieron al aspirante que robó el examen de las oposiciones a bombero

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El candidato respondió las 100 preguntas de manera correcta, incluidas varias que estaban planteadas de manera incorrecta.

El candidato ha sido castigado con una multa de 3.240 euros y evidentemente ha quedado fuera del proceso selectivo de los bomberos.

Un opositor ha admitido haber copiado en el examen para entrar al cuerpo de Bomberos de Mallorca, en el que respondió a las 100 preguntas de manera correcta, incluidas varias de ellas que estaban planteadas de manera incorrecta y que luego fueron retiradas.

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Tanto la madre fueron absueltos debido a la pobre investigación policial.

Durante el juicio, que ha tenido lugar este martes en un juzgado de Palma, el hombre ha explicado que entró en el despacho de su madre, que es funcionaria y tenía acceso a la prueba, y ahí lo fotografió. Su madre por su lado, ha negado que le facilitara la prueba y ha explicado que no estaba al tanto de lo ocurrido.

La Fiscalía ha mantenido su petición de multa de 5.400 euros a la madre (y la inhabilitación en el cargo) y otra de 3.240 euros para el hijo. A ella le acusa de ser responsable de un delito de revelación de secretos y al hijo de ser el inductor. Asimismo, ha planteado una alternativa en la que la madre sería inocente.

En su acusación, la Fiscalía considera que la mujer, aprovechándose de su puesto de funcionaria tuvo acceso al examen de oposición de mayo de 2016 para la provisión de 11 plazas para bomberos y conductores, y que le facilitó la prueba a su hijo. Cabe recordar que el hombre quedó excluido del proceso selectivo en junio de 2017.

Exonerados por falta de pruebas

Sin embargo, tanto la madre como su hijo han sido exonerados de los delitos por falta de pruebas concluyentes. Aunque la jueza reconoce que lo más probable es que la madre haya colaborado, recrimina a la policía que no realizó una investigación más profunda como visualizar las cámaras de seguridad, verificar los mensajes o  la geolocalización de los teléfonos móviles.

De esta forma, la madre queda absuelta del delito de facilitar información privilegiada. Por su parte, si bien el joven admitió que fotografió el examen, al no divulgarlo y como la prueba no contenía ningún dato personal, queda libre del delito de revelación de secretos. Por lo tanto, el único castigo fue ser apartado del concurso.