A partir del 1 de noviembre de 2024, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) implementará una reforma significativa en los subsidios de desempleo, tras la aprobación del Real Decreto-ley 2/2024. Esta reforma busca mejorar la cobertura y simplificar el acceso a las ayudas, eliminando algunos subsidios como la ayuda familiar y el subsidio para mayores de 45 años. Sin embargo, los beneficiarios actuales seguirán recibiendo sus prestaciones hasta agotarlas.
Nuevas medidas para agilizar el sistema
Una de las principales novedades es la eliminación del mes de espera para recibir el subsidio. Hasta ahora, los desempleados debían esperar 30 días desde la solicitud para acceder a la ayuda, pero con la nueva normativa, recibirán el pago de manera inmediata, según informa El Español.
La reforma también introduce nuevas ayudas para colectivos específicos. Las víctimas de violencia sexual y de género podrán acceder a un subsidio a partir de los 16 años. Además, se ampliará la cobertura para personas menores de 45 años sin cargas familiares, emigrantes retornados y trabajadores agrarios eventuales. En este último caso, se reduce a 10 el número mínimo de peonadas necesarias para solicitar el subsidio agrario, facilitando el acceso a esta prestación.
Compatibilidad con el empleo parcial
Otra novedad que se implementará a partir de abril de 2025 es la posibilidad de compatibilizar los subsidios de desempleo con trabajos a tiempo parcial. Con esta medida, los beneficiarios podrán reincorporarse al mercado laboral sin perder el derecho a la ayuda, incentivando su regreso al empleo.
Eliminación de programas y aumento del subsidio
Con la reforma, se eliminarán programas específicos como el Subsidio Extraordinario por Desempleo (SED) y la Renta Activa de Inserción (RAI). Los actuales beneficiarios de estos programas serán transferidos al Ingreso Mínimo Vital (IMV), gestionado por el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), con el fin de simplificar el sistema de ayudas y garantizar una mayor eficiencia.
Por otro lado, el decreto también aumenta la cuantía del subsidio por desempleo, que pasará de 480 a 570 euros al mes durante los primeros seis meses, lo que representa el 80% del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (Iprem) actual.
La reforma tiene como fin crear un sistema de ayudas más justo y accesible para todos los desempleados, independientemente de su situación laboral o personal, y busca incentivar la incorporación al mercado laboral, al tiempo que mejora la cobertura para los colectivos más vulnerables.