Un baño helado y una sola comida al día, la rutina del presidente de Twitter

Jack Dorsey
Dorsey aseguró que come una vez al día, ayuna en el fin de semana y camina 8 kilómetros para llegar a su oficina.

Jack Dorsey cuenta los secretos de su rutina, que ha sido calificada de «espartana» pero también de «locos».

Cuando tienes la fuerza de voluntad para despertarte a las 5 de la mañana y saltar de la cama directo a un baño helado, puedes conseguir todo lo que te propongas. Al menos así se siente, según el cofundador y presidente ejecutivo de Twitter Jack Dorsey, cuya rutina ha sido calificada de «espartana» pero también de «locos«.

Dorsey
Dorsey afirma que su estilo de vida le hace estar más centrado en el día y preparado para afrontar las presiones de su trabajo.

Dorsey desveló parte de su día a día en un programa de podcast especializado en fitness, en el que aseguró que come una vez al día, ayuna gran parte del fin de semana y camina 8 kilómetros diarios para llegar a su oficina. El multimillonario, de 42 años, ha destacado también por su actitud respecto a su propio salario en la compañía que lidera.

A diferencia de otros directores de grandes empresas, el emprendedor decidió al inicio de su exitoso proyecto que no recibiría un sueldo pagado por la empresa.

Una década después de crear Twitter, el multimillonario recibió su primer sueldo: por un monto simbólico de US$1,40 (sí, un dólar y 40 centavos), según un comunicado de la empresa presentado ante las autoridades reguladoras de Estados Unidos. El monto fue un guiño al límite de caracteres que imponía Twitter al principio de su creación (140), en 2006.

La meditación, una de las claves

Aunque se asemeje en muchos aspectos a otros emprendedores de Silicon Valley, la rutina de Dorsey para mantenerse física y mentalmente en forma es muy distinta a la de la mayoría. El cofundador de Twitter explicó al programa de podcast Ben Greenfield Fitness que sus rituales diarios empiezan muy pronto: con el cantar de los pájaros.

A primera hora de la mañana, Dorsey se mete en agua helada por períodos de tres minutos, alternando estos con 15 minutos de sauna a 104 grados centígrados. Tras ello, se pone a meditar durante una hora.

Es una práctica que lleva haciendo desde hace 20 años y considera que es muy beneficiosa.

Dorsey ha defendido las ventajas del mindfulness en diversas ocasiones. En un comentario de Twitter tras un periodo de «retiro espiritual» en Birmania, dijo: «Durante 10 días, sin aparatos electrónicos, sin leer, escribir, sin ejercicio físico, sin música, sin bebidas alcohólicas, sin carne, sin conversaciones, o incluso sin contacto personal con otras personas. Es gratis: todo te lo proveen meditadores de una organización benéfica».

En el podcast de una hora de duración, el emprendedor dijo que solo hace «una gran comida al día», alrededor de las 6:30 de la tarde, normalmente a base de proteínas y ensalada. Tras ello: fruta y chocolate negro.

Dorsey argumenta que su estilo de vida le hace estar mucho más centrado durante el día y preparado para gestionar las presiones de su trabajo.

Sin problemas financieros

En relación a su salario, Dorsey sí se parece más a otros importantes ejecutivos de Estados Unidos. Mark Zuckerberg (Facebook) o Larry Page (Google) reciben un sueldo de solo US$1 al año. También está el caso del fundador de Amazon, Jeff Bezos, el hombre más rico del mundo, que tiene un salario de US$81.840 al año, el mismo que recibía en 1998.

La «clave» de sus salarios simbólicos está en que sus ingresos provienen de otras fuentes.

En el caso del presidente ejecutivo de Twitter, su fortuna -valorada en US$5.000 millones, según la revista especializada Forbes- se basa en los beneficios que recibe de sus acciones en Twitter y Square, una firma de pago por celular que cofundó en 2009.

Con más de 300 millones de usuarios por mes, las ganancias de Twitter llegaron a un récord de US$909 millones en el último trimestre de 2018, un aumento del 24%, impulsado parcialmente por los anuncios de video.

Actualmente Dorsey es dueño del 2,3% de las acciones de Twitter, después de que en 2016 le diera un tercio de su participación accionaria a los trabajadores de la firma (por un valor cercano a los US$250 millones).

Y en el caso de Square, el emprendedor tiene cerca de 60 millones de acciones, cuyo valor ha subido desde los US$9 en 2015 a más de US$75.